El espectacular acantilado que preside la playa rianxeira de Tanxil es un lugar emblemático para el municipio desde los puntos de vista ambiental y turístico. Está ubicado a los pies del chalé de la familia Baltar, un complejo urbanístico pionero en el uso del hormigón por parte de Eduardo Rodríguez Losada Rebellón, arquitecto gallego de renombre que integró, además de la vivienda, un puerto, varias construcciones adicionales y una monumental imagen de la Virxe de Guadalupe de Asorey, retirada por la familia hace años. Pero, desde hace tiempo, ese admirado acantilado está en peligro de desprendimiento, lo que supone una constante amenaza para quienes a diario transitan junto al citado arenal.