Los ‘nuevos equipos’ directivos del Instituto do Milladoiro aguardan que se retome la normalidad

Los dos nuevos equipos directivos del IES do Milladoiro (Ames), el provisional con Emilio Pallarés al frente y el que recogerá el testigo en julio, liderado previsiblemente por Manuel Maseda, expresaron su deseo de que se retome la convivencia en el centro y las cosas vayan a mejor tras unas semanas de fuertes tensiones, que terminaron con una auditoría de Educación y la dimisión del, hasta hace unas semanas, máximo responsable. 

La noticia, que trasladaban a este diario fuentes ajenas a la ANPA, llega después de organizarse una reunión a la que asistieron alrededor de medio centenar de familias en el auditorio de la mayor urbe maiana. Y allí estuvo Pallarés (que trabajará hasta julio con Raquel Miragaya en la vicedirección; María José Calvo, como jefa de estudios; e Iván Capeáns al frente de Secretaría).

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Los resultados de esa auditoría, en la que participaron tres inspectores de Educación, no se harán públicos, pero ha desembocado en los cambios que ya constan en la propia web oficial del IES. Además, la presencia de Maseda, que fue durante años director del Instituto de Baio, refuerza la previsión de que será finalmente la persona que tendrá que reconducir una situación que no solo provocó la movilización de parte de la comunidad educativa, sino también de los propios sindicatos.

Desde la CIG

Al respecto, desde la CIG se mostraban convencidos de que “o novo inspector fixo ben as cousas”, según trasladaban sus responsables. Sin embargo, las mismas fuentes criticaban que Educación “tardase meses” en actuar ante una situación de conflicto de la que, según el sindicato, era conocedora desde el pasado mes de diciembre. “A solución era a que nós formulamos antes do Nadal e que foi expresada polo claustro de profesores”, recuerdan.

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Al respecto, desde la CIG se mostraban convencidos de que “o novo inspector fixo ben as cousas”, según trasladaban sus responsables. Sin embargo, las mismas fuentes criticaban que Educación “tardase meses” en actuar ante una situación de conflicto de la que, según el sindicato, era conocedora desde el pasado mes de diciembre. “A solución era a que nós formulamos antes do Nadal e que foi expresada polo claustro de profesores”, recuerdan.

Los problemas de convivencia que se detectaron desde comienzos de curso –y se intensificaron a finales del año 2023– evidenciaron dos formas de enfocar las dificultades que un pequeño grupo de alumnos presuntamente causaba a la hora de impartir la docencia.