Conclusiones del consejo académico

Aragonès, tras el informe de sus asesores: "El objetivo es un referéndum de independencia"

El 'president' de la Generalitat de Cataluña quiere una consulta y que los resultados "se puedan aplicar"

Pere Aragonès.

Pere Aragonès.

Quim Bertomeu

El 'president' de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, ya tiene encima de la mesa el informe que encargó a un grupo de nueve expertos para empezar a diseñar un acuerdo de "claridad" que contribuya a resolver el "conflicto político". El documento, El Periódico de Catalunya, del grupo Prensa Ibérica, le plantea al menos cinco fórmulas para hacer un referéndum dentro de los márgenes de la legalidad, pero el 'president' tiene clara cuál es la suya: "El objetivo es un referéndum sobre la independencia y que se puedan aplicar los resultados".

Es decir, una votación que supere el marco del 9-N y el 1-O, que fueron consultas con el aval de solo una de las dos partes en conflicto y que, tras celebrarse, nunca se aplicó la decisión de las urnas. En declaraciones este martes desde el viaje institucional que le ha llevado a Bolonia (Italia), no ha querido ir más allá respecto al informe de sus expertos argumentado que se pronunciará con más profundidad cuando se presente de forma "pública, formal y completa". Será entonces cuando él mismo abordará "todo su contenido". Eso sí, ha querido destacar que el Govern siempre estará dispuesto a "valorar" todos los "estudios y dictámenes" que traten de cómo resolver la situación.

¿Si el 'president' tiene claro su fórmula de referéndum, por qué ha encargado un informe? La respuesta es que el 'president' debe hacer equilibrios. Por un lado, tiene que defender su posición, que es la de celebrar un referéndum inequívoco sobre la independencia. Es la posición que le permite mostrar determinación en el flanco independentista. Por el otro, no puede cerrar del todo la puerta a otras opciones, ya que él mismo pide al Gobierno de Pedro Sánchez que esté dispuesto a negociar una solución y, por lo tanto, debe haber un abanico de posibilidades encima de la mesa.

Sea como sea, Aragonès busca dar un salto de calidad respecto a las votaciones de independencia anteriores: quiere que sea "acordada", que es precisamente lo que le daría un reconocimiento mayor -también por parte de la comunidad internacional- y permitiría aplicar los resultados. Lo que Aragonès pide ahora es tiempo para analizar el informe. El primer paso será que los propios expertos lo presenten públicamente. El grupo lo lidera el profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Pompeu Fabra Marc Sanjaume.

Siguiente paso

Siguiendo el esquema que en su día presentó el propio Govern, ahora el siguiente paso una vez se ha conocido el informe sería el de convocar tres debates en paralelo para que los ciudadanos, los partidos catalanes y las entidades sociales puedan hacer sus aportaciones a este acuerdo de claridad. El 'president' no ha querido este martes ahondar en los detalles, pero ha asegurado que "compartirá" el documento "para que la ciudadanía se lo haga suyo". Por lo tanto, sigue con el plan concebido.

Eso sí, sea cual sea el plan final, Aragonès sabe que hay un requisito seguro que deberá conseguir para conseguir una votación como la que persigue: convencer al Gobierno de turno para que avale la operación. Algo que hasta ahora siempre ha tenido un no rotundo de los dos únicos partidos que han liderado un ejecutivo central en democracia, el PSOE y el PP.

Aunque no ha entrado en el calendario que vendrá ahora, sí que ha defendido que el informe de los expertos no se ha cerrado hasta este octubre -pese a que empezaron a trabajar en primavera- porque él mismo quiso alejarlo "de la dinámica electoral". No quiso que coincidiera en el tiempo con las elecciones municipales del pasado mayo o las generales de julio.