Page exigirá a Sánchez una quita de deuda, más AVE y cambios en el trasvase Tajo-Segura

El gobierno de Castilla-La Mancha no será un ejecutivo dócil con el nuevo Gobierno de España. El barón socialista, Emiliano-García Page, crítico con Ferraz por los pactos de investidura, ya ha advertido que no dudará en plantear un recurso al Tribunal Constitucional si se avanza en un referéndum de independencia o si se privilegia a Cataluña en el plano financiero.

Page quiere para la comunidad que preside un acuerdo fiscal en los mismos términos que Cataluña. Para ello exige una quita de la deuda con el Estado que no sea inferior al 20%. “No solo va a hablar Puigdemont, también podrá hablar Page”, avanzó el presidente castellano-manchego tras firmarse el acuerdo de investidura entre PSOE y Junts y dando cuenta de la posición que mantendrá esta legislatura.

Al mismo tiempo, el socialista empujará una reforma del sistema de financiación autonómica en los términos que tradicionalmente viene defendiendo. Esto es, con un reparto que no privilegie el número de habitantes, sino factores como la dispersión territorial teniendo el coste de los servicios públicos.

La lista de demandas de Castilla-La Mancha no se limitará a la financiación. Según avanzan desde el ejecutivo autonómico, pondrán sobre la mesa del Ejecutivo de Sánchez otras dos carpetas prioritarias. Una de infraestructuras, tanto de alta velocidad como de autovías e hidráulicas, y una segunda para “terminar de cambiar” las normas de explotación del trasvase Tajo-Segura. Los cambios propuestos en el trasvase del Tajo-Segura supondrían una reducción del agua trasvasable.