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Destaca Feijóo como un ejemplo de fe en Galicia los premios de EL CORREO

El presidente celebra el trigésimo aniversario de una gala que se afianza desde la pluralidad // Advierte sobre la discordia provocada por proyectos políticos destinados a dividir naciones

La gala de los Gallegos del Año cumple sus primeros 30 años como una cita plenamente afianzada desde la pluralidad. "Neste acto non hai outros. Todos somos nós", destacó ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, durante su intervención, enfatizando que cada uno de los presentes expresa la galleguidad a su manera, y ninguno ve el galleguismo como algo ajeno, sino como una idea compartida y argumentada.

Los galardones que otorga EL CORREO GALLEGO "naceron inspirados por unha gran fe no noso país", ensalzó el titular del Ejecutivo autonómico, afirmando que en los premios se produjo una evolución acompasada con los cambios que se produjeron en Galicia en estas tres décadas. Un viaje por la memoria, dijo, recordando el inicio de una andadura que se puso en marcha en 1990, cuando el gran escritor Camilo José Cela recibió la primera mención.

Aquella "intelixente iniciativa" de este periódico, afirmó, nació sus palabras, con cierto miedo a que "acabaría esmorecendo por falta de materia prima". "Non estabamos entón afeitos a premiar e ser premiados, e polo tanto esa inquedanza estaba fundada", dijo. A día de hoy, sin embargo, la Gala se afianza "e para sorpresa de moitos, non cesan de aparecer galegos dignos de ser distinguidos".

Uno de los hechos notables de aquel 1990 fue la reunificación de Alemania, un proceso en el que como bien citó el presidente participó desde el Parlamento Europeo o presidente Xerardo Fernández Albor. Tres décadas más tarde, Galicia experimentó igualmente una reunificación tras la caída de nuestros propios muros, afirmó. Unificamos tradición y modernidad; unificamos en torno a la Constitución y el Estatuto de Autonomía las diferentes visiones sobre la democracia y el autogobierno; y pusimos los cimientos de un país estable.

A las puertas de que el Tribunal Supremo haga pública su sentencia sobre el procès en Cataluña, Feijóo se preguntó si un acto plural como el que organiza EL CORREO GALLEGO sería posible en comunidades o naciones que no citó pero que coinciden en ser "mosaicos fracturados".

En cambio, Feijóo apuntó que hay países y comunidades que fundamentan su estabilidad "en institucións robustas", y otros que la basan en "una ciudadanía con alta conciencia democrática". Aquí estamos de suerte, porque "Galicia é diferente porque posúe os dous requisitos da estabilidade", dado que "pobo e institucións confabúlanse para facer desta terra un lugar estable que, por iso mesmo, pode evolucionar, cambiar e transformarse sen sobresaltos".

¿Cuál es su principal valor? "Conta coa forza de galegas e galegos para marcar o seu propio destino". ¿Como quiénes? Una buena escolma de ellos les acompañaba ayer en el escenario del Palacio de Congresos, "unha brillante selección está aquí convocada por EL CORREO GALLEGO".

Glosó a cada uno de los distinguidos el de Os Peares. De las cuatro décadas de Xacarandaina popularizando la música y el baile popular, a un Luis Zahera que es un actor total. Del emprendedor por antonomasia que es Andrés Quintá Cortiñas (Extrugasa) a la medicina humanista del doctor Andrés Soto Varela. O Lucía Freitas, sabia porque se desvió del periodismo para acabar siendo profeta en su tierra desde la mejor gastronomía.

De José María Fernández (Jael) alabó la verdadera joya que es su compromiso con todas las causas sociales, su filantropía. Y valoró que expertas como Alicia Estévez Toranzo velen sobre la cadena alimentaria.

Si trae la innovación quirúrgica Juan Carlos García-Valdecasas Salgado, a "una odisea en el espacio" nos lleva Begoña Vila Costas , mientras Rafael Úbeda descubre colores en la música. Como devolvió la sonrisa al profeta Daniel en el Pórtico de la Gloria Ana Laborde Marqueze. De Ferrol al mundo llevó Jesús López Jeréz su factoría musical.

Conoce bien Feijóo a quien fue su conselleira de los dineros, Marta Fernández Currás, que en los orzamentos metía destreza, rigor, empatía "e moitas veces dotes de malabarista".

Luchando contra la obesidad destacó la labor de Felipe Casanueva Freijo, un defensor de la sanidad pública. María Martinón Torres explica la peregrinación del ser humano desde la antropología, mientras con el Padre Andrés Díaz de Rábago "102 anos nos contemplan", un "xigante que nos ilumina". David Chipperfield hizo de su mundo Corrubedo, arquitecto en el que sus obras son paisaje.

"Si vis pacem parabellum", si quieres la paz, prepárate para la guerra, citó, aunque la Brigada de Infantería Ligera Aerotransportable, "a nosa Brigada", la Brilat, prueba que se puede velar en paz por la paz. Representan "honor e orgullo".

Y luego está monseñor Julián Barrio y su "intelixencia espiritual" para darlle sentido a Europa. "Unha expresión afortunada digna dun prelado espiritual e intelixente". "Galicia constrúese en torno ao ideal cristián, e aporta a Europa un parlamento itinerante en forma de Camiño, onde o cristianismo vencella aos pobos europeos e se enriquece con culturas diversas", dijo.

"Señoras e señores. ¿Que é Galicia? Galicia son vostedes, son os premiados, Galicia é ese vencello especial que nos fai partícipes dunha tarefa común na que todos temos algo que aportar", apuntó el presidente. "A obra non rematou", dejó claro antes de felicitar a los premiados y a los anfitriones "por darnos unha nova oportunidade de sentirnos orgullosos do que somos".

A. Núñez Feijóo

Presidente de la Xunta

"Nese acto non hai 'outros', todos somos 'nós', cada un de vostedes expresa a galeguidade á súa maneira, non é alleo"

"Galicia é ese vencello, esa tarefa común na que todos temos algo que aportar... e a obra non rematou"

"Parabéns aos premiados e aos anfitrións por darnos unha nova oportunidade de sentirnos orgullosos do que somos"

11 oct 2019 / 00:00
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