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El cirujano García-Valdecasas entra en el club Gallegos del Año

Ha salvado centenares de vidas a lo largo de su carrera// En su expediente figuran 28 matrículas de honor y tres sobresalientes// La familia "lo es todo para mí"

    Juan Carlos García-Valdecasas Salgado (Tui, Pontevedra, 1952) es toda una eminencia en el mundo de la medicina. Perteneciente a una de las familias más conocidas de Barcelona, que incluye a otro prestigioso médico, Manuel García-Valdecasas -el ginecólogo que ayudó a traer el mundo a los hijos de Shakira y la infanta Cristina- y a la exministra de Administraciones Públicas Julia García-Valdecasas -fallecida en 2009 de párkinson, precisamente el mismo hospital donde el protagonista de esta página operaría al futbolista Abidal tres años después.

    El catedrático de Cirugía y consultor sénior en la Unidad de Cirugía Hepatobiliopancreática y Trasplante del Hospital Clínic, cuenta a EL CORREO que "desde pequeño" quiso dedicarse a curar. "Mi padre, médico, supongo que me condicionó. Pero lo ­cierto es que no pensé nunca en otra cosa".

    El nuevo miembro del selecto club Gallegos del Año -que cuenta en su expediente universitario con 28 matrículas de honor y tres sobresalientes- confiesa que se siente orgulloso de pertenecer a él. "Reconozco que mis raíces gallegas son algo circunstanciales. Mi apellido es andaluz, el de mi madre, gallego", y aunque nació en Tui, "yo he vivido en Barcelona toda mi vida".

    Eso sí, "siempre me he sentido gallego y me encanta ejercer de ello. Me encanta enseñar mi tierra y que la gente conozca la belleza espectacular, la gastronomía extraordinaria y el ambiente maravilloso en el que se vive. Después de toda una vida de dedicación profesional en otra autonomía española, el que se reconozca mi trabajo aquí es un motivo, primero, de agradecimiento y desde luego, de orgullo".

    Consciente de que "la medicina es muy absorbente y te obliga a una gran dedicación, te marcan el camino la fuerza de voluntad, el espíritu de superación y la ambición. Supongo que personas como Joseph Murray (padre del trasplante renal y premio Nobel) o Thomas Starzl (padre del trasplante de hígado), que demostraron el elevado grado de compromiso con la salud", dejaron huella e influencia en el gallego.

    El sistema de donación se inició en el Hospital Clínic de Barcelona, para posteriormente exportarse al resto de Cataluña y, después, replicarse en España, "que pasó de no tener ninguna tradición en la medicina de trasplantes a liderar la actividad de la donación de órganos, siendo la primera a nivel mundial", una "muestra de la grandeza del género humano", sobre todo cuando hablamos de un donante vivo.

    Explica que para ser un buen médico es necesario "que te guste la profesión. Ninguno de mis hijos ha querido seguir este camino. Yo les decía: 'Ningún ­problema para ser médico, pero os ha de gustar mucho'. La palabra vocación quizás es exagerada, creo que la clave está en que te guste lo que haces... como en cualquier otra...".

    En su discurso de ingreso en la Real Academia de Medicina de Cirugía, expresó que "han sido dos mis ­afinidades a lo largo de mi carrera profesional, la que tiene que ver con el ­cáncer colorrectal, a la que dediqué la primera parte de mi carrera profesional, y la ­cirugía hepática y trasplante de ­hígado".

    Debido a que "dentro de la medicina tienes que renunciar a la familia muchas veces, quizás por ello la valoro mejor" y mucho más.

    Para este cirujano, que ha salvado centenares de vidas, "mi mujer, mis hijos y ahora mis nietos son algo que me permite disfrutar de la vida a diario. Son todo para mí".

    De hecho, hubo una época en la que era "famoso por mi capacidad de dormirme en medio de las reuniones nocturnas de fin de semana, con mis amigos. Eso sí, tenía una sorprendente capacidad de despertarme y continuar en la reunión como si nada hubiera pasado...".

    Definirse es una tarea un poco "difícil. Me imagino que todo el mundo se ve a sí mismo bien. Me considero una persona normal, con una escala de valores tradicional. He tenido la suerte de ejercer una profesión maravillosa y el privilegio de hacerlo en un momento que ha representado un salto cualitativo en su calidad extraordinaria (en cirugía), como es el desarrollo de la medicina de los trasplantes y, en concreto, del trasplante de hígado".

    Ha escrito más de 500 artículos, la mayoría en el campo de la cirugía hepática y el trasplante. Su facto de impacto se encuentra por encima de 1160 y el índice de Hirsh es de 46. Ha sido profesor invitado y dado conferencias tanto en España como en el extranjero. Ha sido receptor de numerosas becas de investigación, tanto públicas como privadas.

    Por todo ello, el doctor García-Valdecasas Salgado merece formar parte de esta familia de gallegos premiados, decisión unánime del Grupo Correo Gallego.

    Pues es de las personas que piensan que "el esfuerzo y la dedicación tienen siempre su recompensa". De ahí que anime a los jóvenes a que nunca renuncien a "esos objetivos ambiciosos que pretenden mejorar el bienestar de los pacientes. Y eso significa dedicación, compromiso con el paciente".

    Por eso, afirma que "para ser feliz, hay que luchar por lo que crees". Y se nota que es perseverante y ­logra lo que se propone.

    04 dic 2020 / 18:49
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