Lo más cercano es un valor en alza

LLegué a EL CORREO GALLEGO en el año 2010 sin pensar demasiado en qué depararía el futuro, pero no imaginaba lo que viviría después, y el mejor ejemplo es también el más cercano. Precisamente se cumplieron los diez años durante un confinamiento que aún hoy parece más propio de una película de ciencia-ficción. Adaptarse a un contexto sin competiciones deportivas en todo el mundo, y durante más de dos meses, es un reto para el que no sé si entonces habría estado preparado. Lo aprendido a través de la experiencia ha sido fundamental para saber seguir adelante en estas últimas semanas, pero lo más importante se resume en una palabra: EQUIPO.

Tengo la enorme fortuna de poder apoyarme en compañeros cuya generosidad, ingenio y pasión me permiten seguir aprendiendo cada día. Es algo fundamental en este oficio que elegí muy joven, siendo ya consciente de que el camino no sería fácil pero confiando en que fuese apasionante. Y eso es lo que ha ocurrido en estas últimas semanas. “¿De qué vais a escribir en Deportes?”, era una frase muy escuchada en marzo, y que los propios redactores nos hacíamos a nosotros mismos. La respuesta empiezo a conocerla ahora: “Pues escribiremos de la vida”. Dicho de otra forma: de la vida de los deportistas o de las entidades. De sus alegrías, de sus decepciones, de sus esperanzas, de sus miedos, de su optimismo, de sus muestras de solidaridad, de sus dificultades...

A lo largo de mis diez años en estas páginas he podido ser testigo directo de acontecimientos que ni imaginaba, y los primeros que se me vienen a la cabeza son la Copa del Rey y la Supercopa en las que el Obradoiro ejerció de anfitrión, pero enseguida recupero otros momentos menos multitudinarios aunque igualmente enriquecedores. Hay reportajes o entrevistas a protagonistas ‘desconocidos’ que marcan especialmente, o jornadas tan maratonianas como reconfortantes en cada edición de la Carreira Pedestre Popular de Santiago.

Porque los clubes de élite son la punta del iceberg y los que más atención suscitan, pero por debajo hay numerosas entidades que son fundamentales en el tejido deportivo. ¿Dónde marcaron sus primeros goles Borja Iglesias o Vero Boquete? ¿Dónde empezó a entrenar Moncho Fernández? Nuestra labor también intenta conseguir que esa realidad emerja a la superficie y, además, en un mundo en el que las fuentes de información a nivel global proliferan más que nunca (sean fiables o no), el valor de lo cercano cobra todavía más sentido. En el deporte, también.