Cien medidas para acabar con las “desorbitadas” listas de espera en Galicia

El Sindicato de Enfermería lanza una serie de propuestas “perfectamente asumibles y realizables”, que también ha enviado a la gerente del Sergas

Hospital de Santiago

Hospital de Santiago / ECG

EFE

El Sindicato de Enfermería, SATSE ha trasladado al conselleiro de Sanidad, Julio García Comesaña, un documento con más de 100 medidas y actuaciones para acabar con las “desorbitadas” listas de espera que sufre Galicia desde hace años y que se ha agravado a raíz de la pandemia del Covid-19. Se trata, según indica el sindicato en un comunicado, de propuestas “perfectamente asumibles y realizables” en Galicia, las cuales también han enviado a la gerente del Sergas, Estrella López Pardo.

En primer lugar, SATSE, propone un “Plan de choque” para reducir las listas de espera con una duración de al menos un año y con actuaciones concretas, como generalizar un horario normalizado de atención por la tarde (de 15.00 a 22.00 horas), de lunes a domingo, garantizar la disponibilidad de todas las camas y establecer de manera normalizada las altas de ingresos hospitalarios por parte del personal médico, todos los días de la semana, de 9.00 a 22.00 horas.

Plantea también la instauración de la consulta de alta resolución/acto único, para evitar múltiples citas de un mismo usuario hasta completar la resolución de un diagnóstico o una intervención; un control efectivo de las agendas y citas en consulta; establecer un circuito diferenciado en consultas y quirófano con persona adicional y horario independiente, e implementar una adecuada digitalización de la historia clínica y una correcta coordinación de las herramientas informáticas para lograr un seguimiento compartido y coordinado.

De otro lado, el Sindicato subraya la necesidad de impulsar el desarrollo de protocolos de actuación conjunta entre Atención Primaria y Especializada en procesos asistenciales de elevada prevalencia, procesos de derivación y en aquellos que generan mayores demoras en consultas especializadas y/o pruebas diagnósticas/terapéuticas.

Además de la modernización del equipamiento e infraestructuras existentes, el sindicato considera muy necesario potenciar los centros de especialidades y la hospitalización domiciliaria, apostando por la figura de la enfermera como líder en los cuidados domiciliarios, así como optimizar del uso de las salas quirúrgicas de urgencias y la protocolización de altas en las salas de reanimación.

Otras actuaciones propuestas son implementar la figura de la enfermera coordinadora de las consultas de alta resolución/acto único; impulsar la colaboración de Enfermería, a través de la creación de unidades de acceso vascular, e incrementar la realización programada de Cirugía Menor para Enfermería, tanto en Atención Especializada como en Atención Primaria.

En lo que respecta a los fisioterapeutas, piden incrementar su presencia en Atención Primaria y Atención Especializada para mejorar la calidad de vida de aquellos pacientes que se encuentren en lista de espera quirúrgica y disminuir los tiempos de los postoperatorios y de ingresos hospitalarios.

Por otra parte, quieren un control exhaustivo y detallado de la actividad asistencial desarrollada en cada jornada en cuanto al número y tipo de procesos concretos abordados por cada especialidad médica, en lo referente, al menos, al área quirúrgica y al de consultas externas.

La regulación de la actividad privada y la mejora en la inspección resulta fundamental, según el sindicato, que subraya que no existe un sistema de vigilancia y seguimiento en Galicia, para impedir que los intereses propios de la actividad privada no interfieran en la obligada dedicación y eficiencia en su actividad pública. Ante esta realidad, SATSE propone que el incumplimiento de las condiciones de compatibilidad autorizada se sancione según se determine reglamentariamente.

Además, han de evitarse los conflictos de intereses que podrían darse cuando el profesional llevase a cabo conductas presuntamente poco éticas que repercutirían en el funcionamiento del sistema público, como podría ser la de “derivar” pacientes desde la sanidad pública a un centro sanitario privado.

También debe evitarse la práctica, igualmente poco ética y como primera opción, de desviar pacientes desde unidades y consultas del sistema sanitario público a los programas de auto concertación o, por otro lado, a los centros concertados en la sanidad privada para la reducción de las listas de espera.

Por ello, otra de las medidas propuestas por SATSE es instar a los centros a realizar una auditoría independiente de forma anual para evitar presuntas malas prácticas de forma que se garantice la transparencia de las listas de espera.