Más de la mitad de los españoles cree que habrá otra pandemia como la del COVID antes de 2050

Los resultados del sondeo ‘El Cambio climático y todas sus consecuencias’, de Metroscopia, Fundación AXA y Periodismo2030, se presentaron ayer en Santiago

Alfonso Rueda junto con algunos de los conferenciantes, ayer

Alfonso Rueda junto con algunos de los conferenciantes, ayer / Xoán Álvarez

Tres de cada cuatro españoles piensan que en 2050 muchas zonas costeras serán inhabitables, el 77% auguran que es probable que el agua dulce se convierta en un bien escaso por aquel entonces y tan solo un tercio de los españoles cree que durante los próximos años se innovará tecnológicamente lo suficiente como para revertir el cambio climático. Estas son algunas de las conclusiones que se desprenden del sondeo ‘El Cambio climático y todas sus consecuencias’ realizado por el instituto Metroscopia con la colaboración de la Fundación AXA y el colectivo Periodismo 2030, un estudio pionero en el país que trata de acercar una visión sobre la percepción que tiene la sociedad española del futuro del cambio climático y su preocupación al respecto.

Las conclusiones del trabajo de investigación fueron presentadas ayer en el salón de actos del Pazo de San Roque, en Santiago, por el presidente de Periodismo 2030, Fernando Jáuregui. La inauguración del acto corrió a cargo del presidente del Parlamento gallego, Miguel Santalices; del rector de la Universidade de Santiago de Compostela (USC), Antonio López, y del presidente de la Fundación AXA, Josep Alfonso. Posteriormente a la presentación, hubo una mesa redonda entre el naturalista y realizador de televisión Joaquín Araújo y el divulgador científico Manuel Toharia, ambos expertos en calentamiento global. El diálogo fue moderado por la presidenta de la Asociación de Periodistas de Galicia, María Méndez. Mientras que el jefe del Ejecutivo gallego en funciones, Alfonso Rueda, fue el encargado de dar clausura al foro.

Desde comer mosquitos hasta una nueva pandemia

Lo cierto es que el sondeo, realizado a partir de 3.000 entrevistas, evidencia ciertos planteamientos sorprendentes dentro de la sociedad española acerca del futuro. Durante el foro se expusieron los datos más destacados de la encuesta, como la perspectiva de “cambios drásticos” en la alimentación -la mayoría de los españoles cree que en un futuro próximo se comerán insectos y carne creada en laboratorios, algo que solo el 20% considera positivo-. Así, tras cumplirse el cuarto aniversario de la crisis sanitaria del COVID, un 73% de los encuestados cree probable que se produzca una nueva pandemia en los próximos 30 años.

Por otro lado, en la encuesta puede observarse una tendencia “escapista” entre los españoles: un 40% cree que, “ante los peligros de la Tierra”, las expediciones a Marte serán habituales, más de los que creen que habrá migraciones a la Luna -tan solo un 26%-.

“El mundo está loco”

Durante la mesa redonda celebrada ayer en el foro, ambos expertos coincidieron en que el cambio climático es algo que pertenece más al presente que al futuro. “Me llegan a diario al menos diez informes sobre el tema”, destacó Araújo. “La comunidad científica ya no recomiendan que hablemos de cambio, sino de desastre”, indicó.

Por su parte, Toharia explicó que el cambio climático es la consecuencia directa de la mejora en la calidad de vida de las personas. “Cuando nació mi abuela, la esperanza de vida era de 40 años. Hoy estamos en ochenta y tantos. La hemos doblado en tan solo un siglo”, indicó el divulgador. “No hay duda de que estos cambios fueron extremadamente positivos para la sociedad, pero la consecuencia negativa de ellos la estamos pagando ahora, y la pagaremos en el futuro”, afirmó.

Los expertos también convinieron en que el problema climático es un tema que todavía no ha calado del todo en la agenda pública. “El calentamiento global es algo que no ha saltado a las esferas periodísticas, sociales, y mucho menos, a la política”, apuntó Araújo, que señaló al sector de la información como uno de los principales actores a la hora de combatir el problema climático. “Queda mucho por informar a la gente sobre cómo se puede parar esta catástrofe”, aseveró.

A su vez, Toharia puso el foco en el derroche energético acometido por las sociedades desarrolladas y aprovechó su intervención para afirmar que el mundo actual está “loco”. “Todos los váteres tiran por la cisterna ocho litros de agua potable... ¡Agua que se puede beber!”, exclamó en el salón de actos. “Hay que ser conscientes de que vivir como estamos viviendo es totalmente ridículo”, sentenció.