PERFIL | María José Gómez Rodríguez Conselleira do Medio Rural

María José Gómez Rodríguez: política, profesora y ganadera

Una “mujer todoterreno” que reivindica el rural y “enamorada” del concello que dirige

María José Gómez Rodríguez

María José Gómez Rodríguez / C.V.

C.V.

Cuando Alfonso Rueda, que ahora la elige para dirigir la cartera de Medio Rural, la presentaba el año pasado para revalidar la Alcaldía de Guntín (Lugo) –a la que llegó en 2019 con el apoyo de un 70% de sufragios de sus vecinos tras 28 años de gobierno interrumpido de su predecesor, Jesús Carreira–, describió a María José Gómez Rodríguez como “una mujer todoterreno que es alcaldesa, maestra, madre y, por encima de todo, una enamorada de Guntín”. No mencionó entonces que su polifacética candidata era también profesora de secundaria en la pública, de la especialidad de Inglés, y que la enseñanza, según ella misma dijo en alguna ocasión, es “su vocación”.

Si Gómez Rodríguez es una “enamorada” de Guntín, donde nació en 1976, el concello le devolvió el afecto otorgándole en 2023 un segundo mandato como regidora y su lealtad hacia ese puesto condicionó hasta ahora todas las decisiones políticas de la nueva responsable de Medio Rural. Su rol como regidora lo destacó Elena Candia, presidenta provincial del PP en Lugo, al incidir en su “enorme entrega” por “sus vecinos y por su gente”. Gómez Rodríguez se mantuvo como primera edil incluso tras su elección como senadora del PP por Lugo en julio del año pasado y compatibilizó ambas responsabilidades con las familiares –es madre de dos niñas– y con echar una mano en su propia explotación ganadera, dedicada a la leche.

Precisamente ese aspecto, que “sabe de lo que habla porque trabaja en su explotación y ordeña vacas”, resaltaban ayer fuentes del PP de Lugo para destacar su idoneidad para dirigir Medio Rural. “Nadie conoce mejor el sector”, subrayan. De hecho, cuando asumió su papel como regidora proclamó su intención de trabajar “por impulsar el rural” y lo mismo predicó en el Senado, donde pidió atención urgente para el sector lácteo.

Las nuevas responsabilidades de Gómez Rodríguez al frente de la política agroganadera de Galicia exigen una dedicación exclusiva y la obligarán a abandonar la Alcaldía de Guntín y el Senado. Mientras, en el sector se preguntan hacia dónde dirigirá sus esfuerzos y si mantendrá o no una línea continuista con las políticas de su predecesor, José González. El nombrado conselleiro de Emprego, Comercio e Emigración llevó la cartera de Medio Rural seis años y apostó por reformas legislativas que están en proceso, como la ley de incendios o la de montes vecinales en mancomún, además de dejar pendiente el desarrollo de la Lei de Calidade Alimentaria y de impulsar proyectos vinculados a la recuperación de tierras agrarias, como las aldeas modelo o los polígonos agroforestales. Lo que sí se sabe, porque lo dijo, es que comparte con González priorizar el esfuerzo en que no haya aldeas ni fincas abandonadas.

El currículum de la nueva conselleira, que reside en ese rural cuyo destino regirá y que quienes conocen definen como “humilde”, además de “inteligente” y “afable”, como la calificó su predecesor en la Alcaldía de Guntín, Jesús Carreira, incluye una licenciatura en Filología Inglesa, un doctorado en Humanidades y una carrera de profesorado durante más de una década con paso por la vicedirección del IES de Monterroso. De esa “vocación” en la enseñanza nacen también sus ganas de ayudar. “Lo que me gusta es trabajar con la gente y hacer lo que puedo por ella como también hacía cuando era docente con mis alumnos”, explicó en una entrevista. A Gómez Rodríguez, según ella misma proclama, “nunca” le ha dado miedo trabajar y quienes la conocen lo suscriben. Así, entre 2017 y 2022 fue también jefa de coordinación de Cultura e Turismo en Lugo y de 2022 a 2023, jefa territorial de la Consellería de Educación en la misma provincia.

Fuentes de la dirección del PP ven en su nombramiento “un guiño” a los pequeños concellos de Galicia y consideran que representa a muchos alcaldes y alcaldesas que trabajan en el territorio con pocos recursos, pero con una enorme implicación. De gobernar una localidad de 2.700 habitantes y con un presupuesto de 1,4 millones pasará a gestionar un departamento con más de 625 millones a su disposición.