Los Soles de Repsol iluminan un poco más Galicia, la gran olvidada de su Guía

La Guía Repsol 2021 presenta algunas novedades agradables con respecto a Galicia, que suma 19 nuevos establecimientos a la publicación, aunque la realidad es que esta Comunidad apenas cuenta para la publicación de los soles. De los 1.626 restaurantes que figuran en sus páginas sólo 87 son de aquí, poco más de un 5 % y el porcentaje desciende a poco más del 4,5 % si únicamente se cuentan los que lucen algún Sol. Y eso que todo el mundo sabe que en Galicia se come bien. Todo el mundo menos los responsables de la Guía Repsol.

Pese a todo mantiene en lo más alto de la clasificación, con 3 Soles, el Culler de Pau que dirige Javier Olleros en O Grove y el Casa Solla de Pepe Solla en Poio.

Las novedades llegan con la designación de los locales con 2 Soles, ya que a los diez gallegos ya existentes en este selecto club se incorporan As Garzas, de Malpica, que combina la oferta tradicional con otra más avanzada y con Caco Agrasar al frente de los fogones se asoma al mar desde una casona que es además una pensión rústica de cuatro habitaciones, y Casa Marcelo de Santiago de Compostela.

Conserva su calificación de 2 Soles el Retiro da Costiña de Santa Comba, donde el comensal puede vivir una auténtica experiencia gastronómica con un menú degustación de diez platos y tres postres por sólo 70 euros.

En la entrega del emblema de 1 Sol Repsol llegaron noticias agradables, ya que se incorporan seis nuevos locales, que se suman a los nueve que ya estaban en la Guía. Se hicieron merecedores de esta distinción por primera vez Auga e Sal, de Santiago; Miguel González, de Pereiro de Aguiar; Nado, de A Coruña; Camiño do Inglés, de Ferrol; y O Loxe Mareiro de Carril (Vilagarcía), además de O Balado, que con Roberto Filgueira y Marta Fernández Rey, consigue desde Boqueixón su primer Sol Repsol con una propuesta basada en el producto más auténtico y en el respeto a la naturaleza. La finca familiar de siete mil metros cuadrados se convirtió en una gran huerta con ovejas y gallinas y hasta 800 plantas.

Con horno de leña y una gran chimenea ofrece vaca de Bandeira, cochinillo de Ofelia Piñeiro y merluza de Ribeira.

Siguen apostando por la calidad, al tiempo que lucen 1 Sol, el Asador O Pazo de Padrón, donde los hermanos Manuel y Óscar Vidal utilizan las brasas como hilo conductor para llevar a la mesa una materia prima de gran calidad, tratada con respeto, cocinada con madurez y servida de manera eficiente y discreta, y el restaurante Ríos de O Freixo, donde se cocina lo que trae la marea con especial cuidado al punto de cocción.

RECOMENDACIONES. En el apartado de las recomendaciones Galicia suma trece locales más a los 45 que figuraban en la edición anterior. La comarca compostelana conserva el Casa Ramallo de Rois, un local centenario que sigue siendo fiel a la cocina tradicional casera con sabrosos guisos y a sus platos de temporada como la lamprea o la caza.

Sigue también recomendado por la Guía Michelín el Chef Rivera padronés, que siempre deja la impronta de su buena mano, aunque destaca la lamprea en varias elaboraciones como en pastelón, a la bordelesa o con rissoto, y sus exquisitos platos de caza.

Tiene también un hueco en la guía La Molinera lalinense, donde el cocido es uno de los platos estrella, sin olvidarse de la lamprea, las setas, la caza o una cuidada repostería.

En la zona de Costa da Morte también existen dos establecimientos dignos de visitar a juicio de la Guía Michelín. El establecimiento A Marina de Camariñas destaca por los mariscos adquiridos en lonjas próximas y arroces marineros aderezados con sabiduría y cariño, mientras que el Tira do Cordel de Fisterra está asociado a su exquisita lubina recién pescada, aunque este local ubicado a pie de playa amplía su carta con espectaculares mariscos y el sargo, la dorada o el besugo cocinados sobre brasas de carbón vegetal acompañados de los tradicionales cachelos.

Más reciente es O Fragón, también en Fisterra, que de la mano de Sefa Insua pone a disposición del comensal una cocina de mar en un entorno único, ya que el moderno edificio con amplios ventanales permite disfrutar de una vista única en la que el océano es el protagonista.

Se mantiene también como restaurante recomendado el Río Sil de Carballo, donde las carnes rojas gallegas con maduración en reposo de más de dos meses alcanzan un especial protagonismo.

De hecho, destacan sus jornadas gastronómicas de buey que celebra en los meses de mayo y noviembre.