Una economía agitada, un congreso oportuno

Los últimos quince años han sido extraordinariamente agitados para la economía española. La Gran recesión y la pandemia han sido más intensas en España que en los países de nuestro entorno. En el primer caso, porque nos golpeó en un momento en el que la burbuja inmobiliaria nos había desequilibrado. Y en el segundo, porque España fue uno de los puntos calientes de la pandemia en su arranque, cuando todos teníamos menos claro que hacer, y porque nuestra economía depende más que otras de la vida social y la movilidad. Por no hablar de los efectos de la invasión de Ucrania; aunque en este caso, otros se han llevado la peor parte.

Si el análisis y la gestión de lo anterior ya es para nota, resulta que coincide en el tiempo con varias transformaciones y cambios estructurales enormemente exigentes y que también son particularmente relevantes para España y, por inclusión, Galicia. El envejecimiento poblacional, el cambio climático, la transición energética, la digitalización y la revolución de la inteligencia artificial constituyen, cada uno de ellos, vectores de cambio y adaptación principales. Si los sumamos todos y al resultado le añadimos las crisis coyunturales, es para desbordar a cualquier responsable político, empresario, directivo o líder sindical.

Por ello, es más importante que nunca pensar y diseñar estrategias con capacidad de adaptación. A todos los niveles. Y, por ello, tiene especial valor el congreso que organiza Zona Franca de Vigo los días 27 y 28 bajo el lema “Viglobal Summit 2023, La Economía del Futuro”. En la cita destaca la participación de dos premios Nóbel de economía y un conjunto de ponentes de primerísimo nivel y que incluyen representantes de la academia, el mundo empresarial y la gestión pública. Entre todos ellos deberíamos ser capaces de arrojar luz sobre lo que nos espera a la vuelta de la esquina, sobre oportunidades y sobre riesgos que no estamos teniendo suficientemente en cuenta. No se lo pierda.