La Galicia que rueda

Nadie puede discutir que la emoción en estos comicios autonómicos gallegos se mantuvo hasta el final. No tanto porque alguien dudase de que Alfonso Rueda ganaría las elecciones, cuanto porque faltaba despejar la incógnita de si su mayoría sería suficiente para formar gobierno.

Con el recuento de los resultados hemos salido de dudas y mayoritariamente el pueblo gallego ha optado por la Galicia que funciona, siguiendo el lema del candidato del PP. Un partido que se jugaba algo más que el ser o el no ser en el gobierno gallego, pues los medios de comunicación y los analistas políticos quisieron verlo como una prueba de fuego para el presidente nacional del partido y expresidente de la Xunta de Galicia. Pues bien, parece que Núñez Feijóo podrá dormir un poco más tranquilo esta noche, a la espera de unas elecciones europeas que resultan siempre más lejanas.

A pesar de que las encuestas del CIS pronosticaban una victoria del bloque de la izquierda, el gobierno de España no se lo creía. Prueba de ello es que, por primera vez, se ha programado la emisión de la película del domingo en la primera cadena, en lugar de la tertulia política de Xavier Fortes que se ha relegado al canal 24 horas y a la desconexión gallega. Y es que vivimos tiempos en los que una cosa es perder las elecciones y otra airear los resultados.

Otra conclusión que refrendan las urnas es que Alfonso Rueda ha logrado en dos años como presidente de la Xunta de Galicia encontrar el camino de la victoria y un estilo personal creíble. Sin grandes alaracas y dirigiéndose con humildad al electorado ha sido capaz de persuadir a una amplia mayoría de que, con él, Galicia rueda.