La nueva flota de autobuses de Santiago tendrá que esperar

La ciudad de Santiago de Compostela tendrá que esperar un plazo de "alrededor de dos años" para recibir la nueva flota de autobuses, entre los que se encuentran 13 vehículos eléctricos.

Así lo ha estimado este martes el alcalde de la ciudad, Xosé Sánchez Bugallo, que ha informado a los medios de que aún no ha recibido el Informe Económico del Transporte, necesario para sacar adelante la licitación.

Un retraso, explica Bugallo, que se suma a la subida prácticamente mensual de los intereses, a manos del Banco Central Europeo y obliga a recalcular los datos de acuerdo a este incremento constantemente.

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También el alcalde ha expuesto la incertidumbre de estos contratos, en los que se suelen presentar recursos delante del ayuntamiento o de los órganos competentes de la comunidad autónoma y alargan todo el proceso.

Igualmente, ha sugerido que, de no presentarse ningún recurso, podrían contar con el contrato en alrededor de seis meses a siete meses, aunque, admite no tener una respuesta exacta para la llegada definitiva de estos autobuses.

En esta línea, ha explicado que la adquisición de la flota tiene un plazo máximo de un año que depende de la disponibilidad y la oferta de las empresas. Sin embargo la parte correspondiente a los vehículos eléctricos posiblemente se demore más, ante la falta de existencias en el mercado.