Santiago pedirá a la Xunta la declaración de zona tensionada para limitar la subida de los alquileres

Entre 2017 y 2022 el precio del arrendamiento ha subido más de un 26% en la capital gallega

Según los datos del Observatorio de Vivenda de la Xunta de media un piso cuesta ya 554,5 euros al mes

Una mujer mira anuncios de viviendas en una inmobiliaria de Santiago de Compostela

Una mujer mira anuncios de viviendas en una inmobiliaria de Santiago de Compostela / Jesús Prieto

Santiago quiere controlar la subida del precio del alquiler y para ello pedirá a la Xunta que declare algunas zonas de la ciudad o el municipio en su conjunto como zona de mercado residencial tensionado. El Gobierno de Goretti Sanmartín se sumará así al de Inés Rey en A Coruña, que esta semana anunciaba que ha solicitado ya a la administración autonómica esta medida prevista en la Ley de Vivienda, aprobada por el Gobierno central y que está en vigor desde finales de mayo. Entonces el Gobierno de Alfonso Rueda, sobre el que recae la competencia, ya advirtió que no haría uso de esta herramienta en Galicia.

La ley de Vivienda les da competencias a las comunidades autónomas para que declaren como zonas de alquiler tensionado a aquellos ámbitos territoriales donde exista un especial riesgo por oferta insuficiente de vivienda para la población. En estas zonas podrá establecerse un tope a los precios del arrendamiento. El Concello de Santiago recuerda que en el municipio el precio medio del alquiler aumentó un 26,6% entre 2017 y 2022. En agosto de este año un arrendamiento medio en la ciudad alcanzó los 554,5 euros frente a los 517 de 2022. Cinco años atrás la cifra se situaba en 408,7 euros. En la capital gallega, según la estimación realizada por Atlas Real Estate Analytics, hasta el 82% de los hogares cumple los requisitos que establece la nueva ley para ser declarada una zona tensionada.

La petición a la Xunta por parte del Ejecutivo local no será, sin embargo, inmediata. El Concello explica que la declaración de zonas tensionadas será una de las medidas que se podrían incluir en el Plan de Dinamización de Vivienda Vacía. El pasado lunes, Sanmartín arrancó al presidente de la Xunta el compromiso de que incluya en la Ley de Acompañamiento de los presupuestos autonómicos la definición de vivienda vacía, como paso previo para intentar movilizar las aproximadamente 6.000 casas deshabitadas que existen en el ayuntamiento. "Después de eso, el Concello de Santiago tiene previsto solicitar formalmente a la Xunta el inicio del procedimiento preparatorio necesario para la declaración del municipio en su conjunto o de algunos de sus ámbitos territoriales como “zona de mercado residencial tensionado”, explican a EL CORREO GALLEGO desde el Pazo de Raxoi.

Para que una zona sea declarada como tensionada el Estado ha marcado dos condiciones. La primera se basa en la tasa de esfuerzo, es decir, el porcentaje de la renta disponible de la unidad familiar que se destina anualmente al pago del alquiler y los gastos básicos de la vivienda (12 mensualidades más suministros). Si la tasa de esfuerzo de la zona fuese superior al 30%, se cumpliría el requisito de ser considerada como “zona tensionada”. La segunda condición se enfoca en la evolución de los precios, que deberá ser superior en 3 puntos porcentuales al IPC de los últimos 5 años. Tras el acuerdo con EH Bildu y ERC se estableció como novedad con respecto al borrador inicial que basta cumplir solo uno de los dos criterios y no los dos.

En el caso de Santiago, el informe de Atlas Real Estate sitúa a la mayor parte de zonas tensionadas por la subida de los precios. Para realizar el cálculo, la consultora recurrió a los códigos postales, dado que por el momento no se han establecido los criterios para delimitar las zonas. De los 17 que existen en la capital gallega, nueve cumplen los nuevos criterios para declarar una zona como tensionada. Básicamente abarcan todos los barrios del centro de la ciudad y sólo quedan fuera las parroquias rurales o algunas áreas industriales.

¿Qué ventajas tiene para el inquilino que se declaren estas zonas? El Concello explica que entre las medidas que implica está la prórroga obligatoria extraordinaria de hasta tres años al finalizar el contrato de alquiler; los límites en las rentas de nuevos contratos, que van sujetas al contrato anterior; el incremento del 10% en el precio por obras de rehabilitación, mejoras por firmar contratos por 10 anos; y la posibilidad de cambio en la definición de gran tenedor como propietario de 5 inmuebles y también bonificaciones de hasta el 90% no cálculo do IRPF.

Las zonas tensionadas se aplicarán por un periodo de tres años y su aprobación por la Xunta dependerá de una memoria justificativa y un plan de medidas, indica el Concello. Su declaración por parte de las comunidades autónomas debe ser precedido de un informe sobre el mercado de la vivienda y a su evolución con los indicadores de los precios de alquiler y de la venta de viviendas en los distintos barrios, además de otros parámetros como los niveles de renta de los hogares.

El pasado mes de mayo, cuando se aprobó la nueva Ley de Vivienda, el gobierno gallego se mostró, igual que el resto de comunidades gobernadas por el PP, muy crítico con la normativa. La Xunta sostuvo que la norma invade "claramente competencias autonómicas" y aclaró que prefiere apostar " por las medidas incentivadoras y no por las restrictivas o sancionadoras a la hora de dinamizar el mercado de alquiler", pues entiende que estas últimas lo que consiguen es que se desincentive la puesta en el mercado de viviendas para este fin.

Esta misma mañana, la vicepresidenta segunda y conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez ha insistido en la necesidad de esperar a conocer si la Ley de Vivienda "es constitucional" para declarar zonas tensionadas, así como "tener unos estudios previos". Así se ha manifestadotras las preguntas de los medios sobre la petición de A Coruña de declarar la ciudad como zona de mercado residencial tensionado por los elevados precios del alquiler.

Cuestionada sobre si la Xunta se cierra a aplicar esta normativa en otras zonas de Galicia, la vicepresidenta segunda ha destacado que la administración autonómica ha hecho "estudios a nivel de todo Galicia" que "llaman la atención en ciertos parámetros" para declarar zonas tensionadas.

"Podemos encontrarnos con que tres calles de Santiago se consideran tensionadas y al lado hay dos paralelas que no se consideran tensionadas. O podemos ver ayuntamientos como Palas de Rei que se considera tensionado frente a zonas de Vigo que no se consideran tensionadas. Eso quiere decir que los parámetros no son los lógicos", ha argumentado.