CABALGATA

Los Reyes llenan de ilusión Santiago

Miles de compostelanos disfrutaron del desfile desde distintas calles de la ciudad en una tarde en la que apenas llovió

Los más atrevidos hicieron cola para hablar con Melchor, Gaspar y Baltasar después del tradicional discurso real en el Obradoiro

La magia inundó este viernes Santiago con la tradicional Cabalgata de Sus Majestades (Melchor, Gaspar y Baltasar), que recorrieron las calles de la capital gallega haciendo gala del encanto navideño a su paso y llenando de alegría e ilusión a los más pequeños. A pesar de que las previsiones apuntaban a que sería un día de bastante lluvia, apenas cayeron unas gotas durante el recorrido, lo que permitió disfrutar de mejor forma la tarde-noche más mágica del año.

Los compostelanos disfrutaron de una cabalgata animada, en la que los Reyes llegaron a la praza da Mercé un poco más tarde de lo previsto, sobre las 17.15 horas, en tres camiones de bomberos, y siendo esperados por cientos de personas que aplaudieron su llegada.

Tanto en el Ensanche como en el casco histórico, numeroso público siguió el recorrido de la Cabalgata de Reyes de la capital gallega / jesús prieto

Tanto en el Ensanche como en el casco histórico, numeroso público siguió el recorrido de la Cabalgata de Reyes de la capital gallega / jesús prieto

La comitiva estuvo formada por cinco carrozas, la de los tres Reyes Magos, el cartero real y una quinta con regalos, siendo la Banda de Cornetas y Tambores de Santiago la encargada de abrir el desfile. Justo detrás, tres personas portaban la estrella de Compostela, ya que este año el lema de la Navidad de la capital gallega es Compostela, a estrela do Nadal. También acompañaron a la cabalgata la Cofradía de Veracruz y una asociación de personas con movilidad reducida vestida de estrellas luminosas haciendo juego de colores y acompañadas de música. Cultura Activa portó cuatro osos hinchables con luz, los Quinchilláns ofrecieron pasacalles bajo el título O fondo do mar y Pista Catro, otro pasacalles circense. También llamaron la atención unos transformers mecánicos en forma de zancudos. En total, unas 500 personas, junto con personal de seguridad.

Además, las familias que lo solicitaron previamente vivieron la cita desde uno de los dos trenes turísticos de la ciudad. El resto lo hizo a pie.

Entre los primeros que llegaron al punto de salida de la cabalgata y que esperaban entusiasmados la llegada de los Reyes estaban Ricardo y Vanesa, con sus hijos Laura y Manuel. Viven en Cacheiras, pero es habitual que se desplacen a Santiago para ver la cabalgata y suelen hacerlo desde plaza de Galicia o plaza Roxa, aunque este año por primera vez decidieron optar por el tren turístico. “Como cada año están muy ilusionados por ver a los Reyes”, comentó a EL CORREO Vanesa Rodríguez. Este año incluso es “un poco más especial”, ya que en 2023 su hija estaba ingresada en el hospital, y a pesar de que allí recibió la visita de Melchor, Gaspar y Baltasar, “no es lo mismo”. Su hijo Manuel relató entusiasmado que esperaba que los Reyes le trajesen algo de Lego. “Creo que me porté bien, así que espero que mi deseo se cumpla”, dijo.

La Cabalgata de Reyes de Santiago tuvo como punto de partida la Praza da Mercé / j.prieto

La Cabalgata de Reyes de Santiago tuvo como punto de partida la Praza da Mercé / Jesús prieto

Mientras esperaba por sus amigas para disfrutar con ellas de la cita, la compostelana Adriana, junto a su madre Natalia Queiruga, aguardaba animada para ver a los Reyes. Esperaba con ganas encontrarse bajo el árbol de navidad con figuras de Stitch, el regalo que más desea y del que ha dejado constancia en su carta. Que hicieran o no el recorrido completo hasta el Obradoiro lo decidirían en el último momento, ya que “la vamos a ver con gente de su colegio y entre todos tomaremos la decisión porque va a haber mucha gente”, comentó Natalia, quien aseguró que “es un día en el que a la pequeña no se le quita la sonrisa de la cara”.

Los Reyes Magos desfilan por las calles de Santiago en una cabalgata cargada de ilusión

Los Reyes Magos desfilan por las calles de Santiago en una cabalgata cargada de ilusión / jesus prieto

Naturales de A Coruña, Lucía Manteiga y su hija Carolina, que ahora viven en Santiago, presenciaron la cabalgata en la ciudad por primera vez “con mucha curiosidad”. “Sólo conocemos el recorrido porque me estuve informando, así que esperamos que nos sorprenda”, manifestó Lucía. Carolina comentó que este año tomó la decisión de que sean los Reyes quienes elijan algo para regalarle. “No les pedí nada porque Papá Noel me dejó más regalos de lo esperado”, declaró. Lo que tenía muy claro es que les dejaría algo de comer y beber a los pajes.

Los Reyes llenan de ilusión Santiago

En la comitiva de los Reyes participaron cuatro osos de aire / lorena rey

Desde Praza da Mercé hasta la del Obradoiro, el desfile recorrió lugares emblemáticos de la ciudad como la Plaza de Galicia, la Rúa do Vilar y la Praza das Platerías. En su caminar por Santiago, ataviados con sus tradicionales trajes tan característicos, Sus Majestades fueron saludando a su paso y, como ya marca la tradición, repartiendo caramelos para el disfrute de los más pequeños y de los ya no tan pequeños. En total se llegaron a tirar unos 1.400 quilos de estos dulces.

Sobre las 19.00 horas, el desfile concluyó en el Obradoiro con cientos de personas esperando allí la llegada de las carrozas. Allí, Melchor, Gaspar y Baltasar fueron recibidos por la alcaldesa y miembros de la Corporación municipal, y poco después dirigieron unas palabras a los más pequeños, apoyados por una intérprete de signos, para a continuación pasar al Salón Vermello del Pazo de Raxoi para la tradicional recepción, en la que los niños y niñas tuvieron la oportunidad de transmitirle a los Reyes sus deseos. Mientras esperaban en la cola para recibirlos, todos los que quisieron pudieron degustar un chocolate con churros sin gluten.

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La alcaldesa y parte de la corporación municipal recibieron a sus Majestades de Oriente en el Obradoiro / jesús prieto

Un par de horas más tarde, todos los presentes en el Obradoiro se fueron desplazando hacia sus hogares pensando ya en que al día siguiente se levantarían rodeados de regalos. Una ilusión que nunca se pierde.