Arranca al fin el megaproyecto del Peleteiro tras veinte años de trámites

La tan famosa Operación Peleteiro va por buen camino, y en breve se espera que se convoque una nueva reunión de la comisión mixta integrada por la Corporación y las asociaciones del Ensanche para analizar la propuesta. La propietaria de los terrenos, la Sareb, ha constituido una sociedad promotora que se está encargando de desarrollar el proyecto, y según señalan en Raxoi, está trabajando a buen ritmo para ponerlo en marcha cuanto antes. De esta forma, tal y como había adelantado este periódico, a principios de año se remitió al Ayuntamiento una primera propuesta para el Plan Especial de los terrenos, sobre la que los técnicos municipales solicitaron algunos ajustes que ahora se están llevando a cabo.

Una vez que se incluyan estas modificaciones, el documento se presentará a la comisión para su posterior debate en el seno del pleno municipal, lo que permitiría desbloquear por fin un proyecto que se comenzó a plantear a principios de siglo. En términos generales, ya hay un acuerdo en lo que se refiere al reparto de usos y superficies, que no ha variado con respecto a las últimas propuestas. La novedad introducida ahora es que ya se ha fijado dónde irá la gran plaza pública que se abrirá entre las edificaciones. En principio, había varias opciones, aunque se descartó de inicio la de colocarla en el centro con los edificios alrededor, más que nada por problemas de seguridad y de evitar fenómenos como los botellones aprovechando el aislamiento de la calle.

Quedaban dos opciones, que era dejarla abierta a República Arxentina, tal y como está ahora el patio del antiguo colegio, o abrirla hacia el otro lado, a San Pedro de Mezonzo, que es la propuesta por la que ahora se ha optado, lo que supondrá un cambio en la actual fisonomía del Ensanche, al desaparecer la fachada del centro educativo. Hay que tener en cuenta que la normativa urbanística vigente en la actualidad recoge una edificabilidad menor que la que existía en el momento en el que se construyó el edificio del colegio, a mediados del siglo pasado. De ahí que las nuevas construcciones tendrán un volumen menor que el actual inmueble. También se desechó la propuesta de incluir el edificio de la esquina a las dos calles, de titularidad privada, dentro de este proyecto para abarcar toda la manzana. La reducción de la edificabilidad apenas supondría aumento de superficie.

De esta forma, el proyecto definitivo podría sustanciarse este año, y dado que ya cuenta con promotora, una sociedad formada por la Sareb y un fondo americano, el desarrollo de la misma también, lo que supondría poner fin a un vacío en pleno centro del Ensanche. El edificio permanece sin uso desde hace más de una década ya que, tras el traslado del centro educativo a sus actuales instalaciones en Montouto, solo se utilizó temporalmente en 2010 como sede provisional de la Comisaría de la Policía Nacional, mientras se rehabilitaba el cuartel de Rodrigo de Padrón.

Desde entonces fue objeto de una intrusión, que se saldó con un pequeño incendio, afortunadamente sofocado a tiempo y sin provocar grandes daños, y de un intento de okupación que no pasó del patio. De hecho, durante mucho tiempo una empresa de seguridad se encargaba de controlar la parcela. También fue noticia en este tiempo por el estado en el que se encontraba el pequeño jardín que da a San Pedro de Mezonzo, donde no solo crecían las malas hierbas, sino también las ratas, lo que obligó a intervenir al Ayuntamiento para evitar que se acabaran colando en los negocios de la zona, de puertas abiertas con motivo de la pandemia de la COVID.

La operación tendrá, además, otra ventaja: dentro del proyecto se recoge un espacio de 900 metros cuadrados que estarán destinados a uso municipal por determinar.