Jueves tranquilo pero con numerosas llamadas a la Policía por fiestas en pisos

Segundo jueves universitario y segunda jornada de fiesta con escasos incidentes en la capital gallega. El arranque del curso, con noches en las que el tiempo está además respetando, están siendo, por el momento, bastante tranquilas, aunque los vecinos empiezan a quejarse por el ruido en la calle. No obstante, la pasada madrugada las actuaciones de la Policía Local fueron mínimas, una situación que contrasta, y mucho, con el ambiente de desmadre total vivido el curso pasado.

En esta ocasión, la movida de este jueves se saldó con siete intervenciones en pisos por ruidos y tres proposiciones de multa por beber en la vía pública. En todo caso, hubo quince llamadas de vecinos de diferentes edificios por la algarabía que se estaba montando a causa de los botellones, aunque, una vez en el lugar, sólo los citados siete fueron casos positivos, quedando los restantes en meras advertencias.

Por otra parte, en lo que respecta a otro de los momentos críticos de la noche, el del cierre en los locales de ocio de la ciudad, el parte emitido por la Local cita la disolución rápida de unas trescientas personas a la salida de una discoteca, en la calle Curros Enríquez, así como la mediación en una pequeña pelea en la zona nueva, un enfrentamiento con heridos leves.

“Polo que vemos nos partes, parece que a cousa vai mellor que o ano pasado, aínda que igual algún veciño ten unha visión diferente pola realidade que teñen que vivir. En todo caso, polo menos este inicio non está sendo tan gordo. Tamén se está apreciando, dende o noso punto de vista, o reforzo policial que se está a facer polas noites”, explicó el concejal de Seguridad Ciudadana, Gonzalo Muíños, en declaraciones a EL CORREO GALLEGO.

DESTACABLE COMPORTAMIENTO EN EL CAMPUS SUR. Dentro de las actividades programadas en los actos de bienvenida de la Universidad de Santiago de Compostela, en la noche de este jueves se realizaron una serie de conciertos en el Campus Sur, una velada que culminó a las 00.00 horas y que, según el propio concejal, destacó por el gran comportamiento de los universitarios.

En este sentido, desde el Concello, a través de Urbaser, se hizo un refuerzo de contenedores en la zona, para evitar la acumulación de residuos y lo cierto es que fue todo un éxito, remarcan. A tenor de lo indicado por los agentes, apenas había residuos tirados en la calle y no hubo incidentes.

De este modo, si nada cambia, se demuestra que tras la locura vivida el año pasado, con el subidón que provocaba la apertura de las restricciones, la movida ha regresado a sus cauces habituales: con ruidos, pero sin desmadres.