Bankinter nombra consejera delegada a Gloria Ortiz y sitúa a Dancausa como presidenta no ejecutiva

Cambio en la cúpula de Bankinter. El banco controlado por Jaime Botín ha anunciado este miércoles que María Dolores Dancausa, su consejera delegada desde finales de 2010, será nombrada presidenta no ejecutiva en sustitución de Pedro Guerrero, que ocupaba el cargo desde marzo de 2007 y dejará de ser consejero. Su puesto como primera ejecutiva de la entidad lo pasará a ocupar Gloria Ortiz, que entró en Bankinter en 2001 y quien tras ocupar las direcciones de relación con inversores (2006-2008), financiera (2008-2016) y banca digital (2016-2021), era la actual directora general de banca comercial. 

Los cambios serán efectivos a partir de la junta general del banco que tendrá lugar el próximo 21 de marzo. Bankinter ha informado de que ya se ha dado inicio al proceso de evaluación de la idoneidad de las candidatas por parte del Banco Central Europeo (BCE), que como supervisor de las entidades financieras significativas de la zona euro debe dar su aprobación a este tipo de nombramientos. Dado que las dos banqueras ya ocupaban cargos relevantes en el banco, lo más probable es que no afronten ningún problema para obtener el visto bueno del Mecanismo Único de Supervisión del BCE.

Bankinter ganó 684,7 millones de euros entre enero y septiembre, un 59% más que en el mismo periodo del año pasado y un 22% más que los 560 millones que obtuvo en todo 2022. El del ejercicio anterior fue el mayor beneficio recurrente en sus casi 60 años de historia, pero en 2023 lo va a superar con creces. "Creemos que vamos a cerrar un ejercicio que va a ser magnífico", aseguró Dancausa hace unas semanas.

La mejora del beneficio de Bankiter se sustenta en que los ingresos obtenidos por la diferencia entre lo cobrado y lo pagado en intereses a los clientes se dispararon un 53,8% frente a hace un año, hasta los 1.638 millones. El tipo medio de sus créditos, así, ha subido en doce meses del 2,14% al 4,12%, mientras que el de los depósitos solo ha aumentado del 0,05% al 1,09%, con lo que el diferencial se ha ensanchado de dos a tres puntos porcentuales, un nivel que el banco prevé que se mantenga en los próximos trimestres.

El banco ha elevado su capital en un año del 11,9% al 12,48%. Y pese a ello, la fuerte mejora de su beneficio gracias al alza de tipos ha permitido que la rentabilidad sobre dicho mayor capital también suba con fuerza, del 11% a un muy elevado 17,11%. El único indicador relevante donde ha tenido un pequeño deterioro es en la tasa de morosidad, que ha repuntado ligeramente del 2,1% al 2,19%.