El voto de los 80.000 jóvenes que se estrenan en estos comicios puede ser decisivo. Por eso los partidos centran sus ofertas electorales en el empleo o el acceso a la vivienda. ¿Pero funciona? Da la sensación de que el desapego es cada vez mayor. Los jóvenes sienten que el debate político está muy alejado de sus problemas reales, que los líderes no hablan su mismo idioma e incluso confiesan que ni conocen a los candidatos. Sienten que la campaña electoral no va con ellos.

Aunque menos habitual, también hay jóvenes como Javier que hace campaña por uno de los candidatos. Empleo, sanidad y vivienda, problemas reales lejos de los asuntos que están enfrentando a los partidos en esta campaña electoral. Con las urnas a la vuelta de la esquina y el voto todavía en el aire, es momento de informarse sobre las opciones.