Bugallo, del Pazo de Raxoi al Palacio del Senado

La última palabra la ofrecerá este sábado el comité federal que oficializará las candidaturas al Congreso y Senado que presentaron los diferentes órganos regionales.

Bugallo toma el relevo al exalcalde de Oroso, quien el pasado lunes emitió un comunicado reivindicando su trabajo durante esta legislatura.

Xosé Sánchez Bugallo durante un paseo por el parque de la Alameda en la reciente campaña de las elecciones municipales / JESÚS PRIETO

Xosé Sánchez Bugallo durante un paseo por el parque de la Alameda en la reciente campaña de las elecciones municipales / JESÚS PRIETO

Todo apunta a que Xosé Sánchez Bugallo cambiará en breve el compostelano Pazo de Raxoi por el madrileño Palacio del Senado. El todavía alcalde en funciones de Santiago tendrá que resistir el pulso que se librará el próximo 23 de julio para que los socialistas de A Coruña conserven al menos el escaño que actualmente tienen por esta circunscripción en la Cámara Alta. Como adelantó EL CORREO GALLEGO en exclusiva esta semana, el hasta ahora regidor de la capital gallega es la persona elegida por el PSdeG de la provincia de A Coruña para encabezar la candidatura al Senado, que conforma con Natividad González y Fabián Canosa.

El nombre de Bugallo como posible cabeza de la lista provincial empezó a sonar a finales de la semana pasada. Personas del círculo más cercano del socialista aseguran que “la propuesta le llegó desde el partido el jueves 1 de junio”, apenas cuatro días después del batacazo electoral en los comicios municipales, a lo que él respondió que “daría una respuesta el lunes siguiente”, al regreso de su viaje oficial a Canarias. Esta versión estaría frente a la ofrecida por otras fuentes socialistas que, como publicó este diario el lunes pasado, sostienen que fue el propio Sánchez Bugallo quien “ha movido ficha” postulándose como cabeza del cartel de los socialistas coruñeses.

Consultado ayer por EL CORREO, quien ha sido alcalde de Santiago hasta en seis legislaturas ha optado por la prudencia y el silencio. Xosé Sánchez Bugallo señaló que no se pronunciará sobre su candidatura al Senado hasta que el proceso de elección interna se haya completado. Si todo va bien, será hoy mismo. La asamblea local del PSdeG formalizó el martes la propuesta del alcalde en funciones para encabezar la lista a la Cámara Alta, que ratificó este jueves el comité provincipal del PSdeG; y ayer el autonómico. La última palabra la ofrecerá hoy el comité federal que oficializará las candidaturas al Congreso y Senado que presentaron los diferentes órganos regionales.

De conseguir el PSdeG los resultados que desea, Xosé Sánchez Bugallo cambiará sus paseos por el parque Eugenio Granell o la Alameda por las caminatas por el parque del Retiro. Tras la debacle sufrida el 28 de mayo, el candidato del PSdeG reiteró una y otra vez que se retiraba de la política municipal, y llegó a manifestar que su intención era “disfrutar como un pensionista más” de sus paseos por los parques y senderos verdes de la capital gallega. Aunque también admitió que su “gran vocación política” le impediría dejar de valorar cualquier propuesta que le pudiese llegar de su partido. Apuntaba, además, que siempre estaría dispuesto a estudiar el cargo de responsabilidad planteado, midiendo también su capacidad para desempeñarlo de una manera óptima.

Privilegio constitucional

En este contexto, cabe destacar que, de conseguir un escaño en la Cámara Alta, Bugallo no solo obtendría las retribuciones ordinarias de cualquier senador, sino que también quedaría inmunizado por el aforamiento que establece la Constitución Española, la cual en su artículo 71 recoge que “los diputados y senadores gozarán de inviolabilidad por las opiniones manifestadas en el ejercicio de sus funciones”. Además, añade, “durante el período de su mandato gozarán asimismo de inmunidad y solo podrán ser detenidos en caso de flagrante delito”. Tampoco podrán ser “inculpados ni procesados sin la previa autorización de la Cámara respectiva”, mientras que en las causas contra diputados o senadores solo “será competente la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo”. En el caso de Sánchez Bugallo, no cabe duda de que este amparo podría resultarle beneficioso en el caso de que la denuncia que ha presentado el PP de Santiago contra varios miembros de su gobierno local por el Caso Pichel pueda tener consecuencias.

Bugallo toma el relevo como cabeza de lista al senado al exalcalde de Oroso, quien el pasado lunes, tras conocerse la información adelantada por este diario, emitió un comunicado reivindicando su trabajo durante esta legislatura en el Senado y postulándose para revalidar este cargo. Sin embargo, tras oficializarse la candidatura del regidor compostelano, ayer quiso matizar su conformidad con esta designación. En declaraciones a Onda Cero, Manuel Mirás manifestó que la candidatura de Bugallo responde “a un acordo” por el cual “en un principio” será cabeza de lista el alcalde en funciones de Santiago “e no sucesivo ó mellor poida eu tamén repetir”, porque “está todo consensuado como compañeiros e amigos”. Manuel Mirás trasladó sus “parabéns” al cabeza de lista del PSdeG de A Coruña al Senado así como “a todos os que forman parte da candidatura”. Con esto, quiso remarcar que “eu tamén estou satisfeito, aínda que tamén se apostara por min, pero dende o punto de vista a traxectoria humana Sánchez Bugallo merecía estar no Senado. Evidentemente, eu cedín”, reconoció.

El hecho de que la elección de senadores se haga de forma nominal, es decir, que cada elector marque en la papeleta el candidato que desea que salga elegido, pudiendo decantarse incluso por políticos de diferentes partidos, es otro factor a tener en cuenta en el marco de las elecciones generales del 23 de julio. Cada elector tiene que marcar directamente quién quiere que sea su senador, más allá de las siglas. Un hecho que para cualquier partido político tiene sus pros pero también sus contras, puesto que el tirón o el nivel de popularidad del candidato es clave para conseguir o perder apoyos.