Las siete líneas rojas que el PSOE pone al bipartito local para apoyar los presupuestos

Entre las exigencias de los socialistas destaca la conservación de la Casa da Xuventude, una nueva licitación del Servizo de Axuda no Fogar o la reforma de la rúa Amor Ruibal

También reclaman que se habilite una partida para la mejora de los polideportivos de Santa Isabel y de Vite 

Piden una bolsa de crédito para el nuevo centro de mercancías y recuperar la zona del Banquete de Conxo

El PSOE exige que se mantenga en pie la antigua Casa da Xuventude para apoyar las cuentas

El PSOE exige que se mantenga en pie la antigua Casa da Xuventude para apoyar las cuentas / Antonio Hernández

A menos de un mes de que finalice el año, el bipartito municipal de Santiago continúa trabajando en el borrador de los presupuestos de 2024, unas cuentas que para salir adelante necesitarán, teniendo en cuenta que el ejecutivo que lidera Goretti Sanmartín está conformado por tan solo ocho ediles, del apoyo de alguno de los dos partidos de la oposición: PP o PSOE, aunque es evidente que la formación de gobierno tratará sobre todo de llegar a acuerdos con el segundo, que tras las elecciones del pasado mayo ya apoyó la investidura de la alcaldesa.

No obstante, el grupo socialista municipal de Santiago se presenta ante este proceso con al menos siete líneas rojas por las que no está dispuesto a pasar a la hora de prestar su apoyo para sacar adelante los presupuestos de 2024.Según ha podido saber EL CORREO GALLEGO, la formación sigue a la espera de que el gobierno local del Bloque Nacionalista Galego y Compostela Aberta le haga llega llegar, al igual que al PP, el borrador con la propuesta de las cuentas del próximo año. Sin embargo, los socialistas tienen muy claras las concesiones por las que no están dispuestos a pasar. Son al menos siete. La primera, el derribo de la antigua Casa da Xuventude.

Las fuentes aseguran que el PSdeG no está dispuesto a aprobar ninguna propuesta de presupuesto que contemple una partida para echar abajo el edificio municipal ubicado en la praza do Matadoiro, rodeado de no poca polémica. En una reciente comparecencia ante los medios, el portavoz municipal de los socialistas en el pazo de Raxoi, Gonzalo Muíños, ya advirtió al bipartito de que si pretende derribar la Casa da Xuventude deberá negociar con el PP, puesto que la formación del puño y la rosa no está dispuesta a que se prescinda de esta infraestructura, para la que ha presentado de la mano con la Deputación de A Coruña un proyecto de recuperación, que el actual ejecutivo ha rechazado.

El PSOE también considera que el Concello debe seguir ampliando las horas del Servizo de Axuda no Fogar y ofreciendo “facilidades a las trabajadoras, como la tarjeta de aparcamiento que pusimos en marcha para permitir que pudieran dejar su vehículo en cualquier zona de Santiago”. Además, insiste en que es necesaria una nueva licitación del servicio y un nuevo estudio económico adaptado a la situación actual. “Ahora que se va a iniciar la negociación de los presupuestos, es imprescindible que encima de la mesa se ponga un incremento de la partida para el SAF, tal y como hicimos nosotros, que asegure una cobertura total a todas las personas demandantes del servicio”, insisten los socialistas, que recalcan la necesidad de que “la lista de espera vuelva a ser cero, como intentamos en nuestro mandato”. También exigirán que las cuentas contemplen recursos para una óptima prestación del servicio.

Más allá de estas dos exigencias, los socialistas también impondrán al bipartito que dote de crédito otros cinco proyectos que consideran indispensables para el progreso de la ciudad. Por un lado, reclaman que se incluya en las cuentas una partida para la rehabilitación de los pabellones polideportivos de Vite y Santa Isabel. El anterior gobierno, con Xosé Sánchez Bugallo a la cabeza, presentó el pasado mes de enero un plan para realizar obras de mejora en ambos edificios. Pasaba por un acuerdo con el Gobierno de España para repartir los costes de las obras.

 Los trabajos consistirían en una mejora de su eficiencia energética, sostenibilidad y accesibilidad. Además, en el pabellón de Vite también se cambiaría la cubierta exterior y todos los elementos de impermeabilización, de luz, de agua y de servicios. El coste de ambas obras asciende a 4,3 millones de euros, de los que el Concello pondría en torno a un millón, mientras que el Ejecutivo central aportaría sobre 3,3 millones a cargo de los fondos Next Generation.

También deberá dotarse del crédito municipal necesario el proyecto Entre Sar e Sarela, que entre otras iniciativas incluye la restauración del barrio verde de Pontepedriña, que contempla la renaturalización de la manzana y la creación de un corredor ecológico urbano; así como la naturalización de la laguna del Auditorio de Galicia, la restauración fluvial del Río Corgo y la mejora ecológica de las áreas verdes contiguas.

También pretende la consolidación del Anillo Verde Exterior, la restauración ambiental y creación del Laboratorio Vivo Urbano Agroecológico en el Jardín Botánico; así como la recalificación y recuperación ambiental del área verde del Barrio de Cornes, y la restauración ecológica y fomento de la biodiversidad en el Monte Periurbano de O Viso.

En relación a Entre Sar e Sarela, cabe recordar que el Concello de Santiago aceptó el pasado mes de noviembre formalmente la subvención de 3,2 millones de euros de la Fundación Biodiversidad que permitirá, entre otras actuaciones, la recuperación del lago del Auditorio de Galicia, tal y como anunció la alcaldesa de Santiago, Goretti Sanmartín, que avanzó que el ejecutivo municipal también aprobó la constitución de los órganos que gestionarán estos fondos europeos. Para la regidora de la capital gallega, el proyecto Entre Sar e Sarela se trata de una iniciativa “importantísima”, que tiene como principal objetivo, según manifestó, “xerar un modelo urbano sustentatable aumentando a infraestructura verde, potenciando a conectividade ambiental do conxunto e recuperando áreas degradadas”.

La reurbanización de la rúa Amor Ruibal es otra de las iniciativas que los socialistas no están dispuestos a dejar pasar. Esta obra es una de las grandes promesas de Xosé Sánchez Bugallo en la última campaña electoral, junto con la reforma de la rúa do Restollal, que pasaría a formar parte de la zona de bajas emisiones en el marco de las restricciones de la nueva ley de Cambio Climático.

Además, exigirán que se habilite una partida para la materialización del nuevo centro de mercancías del Tambre, desde el que se ejecutará el reparto de una milla al pequeño comercio de la zona monumental, y otra dotación presupuestaria para la también prometida renaturalización del entorno del Banquete de Conxo