Gregory murió por un navajazo que le seccionó la arteria femoral: en su ropa se aprecian 12 impactos de arma blanca

Gregory Furcal falleció a los 31 años a causa de uno de los navajazos que recibió la madrugada del 2 de enero de 2023 en la calle Santiago de Chile, en Compostela, y que le seccionó completamente la arteria y vena femorales. Así lo confirmó el médico forense que practicó la autopsia al cadáver durante el juicio que se celebra en la sección sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña, con sede en Santiago. El perito explicó, apoyándose en varias fotografías del cadáver que se mostraron al tribunal del jurado, las diferentes lesiones externas que se apreciaban en el cuerpo del fallecido, haciendo hincapié en la producida por arma blanca en el muslo de la pierna izquierda, la cual señaló como la causante del fallecimiento.

Pero también se refirió a dos cuchilladas en la parte de la espalda, en forma de cruz, y que apenas penetraron en el cuerpo un centímetro, puesto que, según detalló el experto, impactaron contra un plano óseo en la columna vertebral. Con esto, apuntó que estas dos puñaladas no serían letales, a priori, pese a que seccionaron tres pequeñas arterias intercostales. Además, el forense también hizo referencia a otros dos traumatismos que presentaba el cuerpo y que todo apunta a que fueron producidos por los golpes que recibió la víctima.

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De la autopsia también se desprende que en el cuerpo de Gregory había señales de lucha pero no de defensa. El especialista detalló que cuando se practican autopsias a cuerpos de personas que han sido atacadas con armas blancas el hecho de que muestren lesiones en los antebrazos, las palmas de las manos o los dedos, provocadas por el arma blanca del agresor, suele considerarse una señal de autodefensa. Sin embargo, en el caso de Forcal, en los exámenes que se practicaron al cadáver no se apreció ninguna marca de estas características.

En esta sesión del juicio, en el que se está procesando a los hermanos Michael y Víctor (La Bibi) Delgado Olguín, también se constató que en la ropa que vestía Gregory en el momento de la agresión se apreciaron doce impactos de arma blanca por parte de los investigadores de la Policía Científica. Los policías, que señalaron estas marcas en las propias prendas que se le mostraron al jurado, detallaron que en el jersey que llevaba la víctima se aprecian un total de siete marcas por impacto de arma blanca: cinco en la parte frontal, repartidas en tres zonas; y dos en la trasera. Los investigadores manifestaron que de las marcas que se ven en la parte delantera "varias" están en la zona del pecho del jersey, si bien apuntaron que esta no tendría porque corresponderse con la misma zona del cuerpo de la víctima, ya que en medio de una pelea la prenda tiende a desplazarse.

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Por otro lado, en el pantalón se aprecian otras cinco marcas de impacto de un objeto cortopunzante, cuatro en la pierna izquierda, donde se produjo la puñalada que seccionó la arteria y vena femorales; y otra más en la derecha. Los investigadores indicaron que estas marcas son todas de similar apariencia. Con esto, de las doce puñaladas que la víctima habría recibido, solo tres llegaron a lesionar su cuerpo, una de las cuales, de características letales.

En la sesión de este viernes también se dieron detalles sobre los análisis que se realizaron a la ropa de los acusados. Las prendas superiores de Michael Delgado Olguín, tanto la cazadora verde oliva como una camiseta negra y la camiseta interior de tirantes, presentaban la marca de la puñalada que recibió en la zona de la espalda, y que según el forense le provocó un orificio en la cavidad torácica que motivó la saturación de los pulmones, de ahí que el acusado tuviese serias dificultades para respirar y fuese trasladado a un centro sanitario.

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Sobre la ropa de Víctor Manuel Roa, la persona que trató de ayudar a Gregory en la pelea, acusado por otro lado por la defensa de haber sido el autor de la puñalada que sufrió Michael Delgado, los agentes de la Policía Científica indicaron que solo presentaba salpicaduras de sangre, pero ninguna marca de impacto de arma blanca. En cambio, el forense confirmó que el amigo de la víctima sufrió lesiones en dos dedos de una mano, provocadas aparentemente por un objeto cortopunzante.

Con respecto a las armas, en la vivienda de los principales sospechosos se encontraron cuatro: un machete en una habitación, una navaja con el mango verde en otra estancia; y luego, bajo una butaca en la sala de estar, otra navaja con el mango de color nácar, que tenía restos de sangre; y también un cuchillo de cocina. Los análisis detectaron restos de ADN de Gregory Furcal, los hermanos Michael y Víctor Delgado Olguín y una mujer no identificada en al menos las dos armas que se encontraban bajo el sillón. El ADN de Víctor Manuel Roa no se apreció en ninguno de estos objetos.