Con el calor reventando los termómetros y las vacaciones, en los próximos días toca hacer una escapada a alguna de las playas que se encuentran en las inmediaciones de Santiago.

Aquella línea ferroviaria entre Cornes y Carril, la primera que se inauguró en Galicia, sirvió a finales del siglo XIX para poner los arenales de Arousa un poco más cerca. Esto multiplicó unos vínculos que mantienen los picheleiros con Vilagarcía hasta hoy.

En las últimas décadas, las opciones se han multiplicado gracias al avance de las comunicaciones por carretera. La AP-9, y posteriormente las autovías de Barbanza y Noia, han hecho realidad el sueño de muchos compostelanos que querían darse un chapuzón en el mar sin hacer las maletas.

Compostela-A Concha (Vilagarcía)

A 45 Km de la ciudad del Apóstol, la capital de O Salnés es su puerto natural. De ahí el nombre que recibe la playa, ubicada en el casco urbano y accesible a pie desde la estación de ferrocarril. Tranquila y con todos los servicios (alquiler de sombrillas, vigilancia, Cruz Roja, duchas, rampas, W.C.) está flanqueada por un paseo marítimo que ofrece hermosas vistas de la ría de Arousa.

Cabío-Lombiña (A Pobra do Caramiñal)

Justo en el extremo contrario de la ría de Arousa, se sitúa otro de los paraísos de arena y sal más frecuentados por los compostelanos, en particular por las familias. A 60 Km de la ciudad, dispone de juegos de agua para los niños y un pinar que sirve de refugio cuando el calor aprieta. Cuenta también con todos los servicios.

Broña (Outes)

Todavía más al norte, en la ría de Muros-Noia, se encuentra este paraje de aguas tranquilas con parque infantil y una pasarela sobre el río. A solo 42 Km de Santiago, tiene servicio de vigilancia, aparcamiento, duchas y servicios de hostelería próximos.

Coroso (Ribeira)

Localizada en un entorno urbanizado, regala vistas de la villa de Ribeira, la isla de A Rúa y la ría de Arousa mientras uno toma el sol. A 55 Km de Compostela, está equipada con todos los servicios.

O Vilar (Ribeira)

No es de las más cercanas (70,6 Km), pero merece la pena recorrer unos cuantos kilómetros más para disfrutar de un arenal virgen. Integrada en el Complejo Dunar de Corrubedo e Lagoas de Carregal e Vixán, es una playa de mar abierto y, dependiendo del día, puede tener oleaje. También dispone de todos los servicios.

Barraña (Boiro)

A 50 Km de la capital gallega, se emplaza en un entorno urbanizado y muy tranquilo. Con paseo marítimo, fuentes y árboles, en su cartera de servicios se incluyen parquin, duchas, rampas, servicio de limpieza y locales de hostelería.

As Sinas (Vilanova de Arousa)

Hay que dirigirse al margen contrario de la ría de Arousa para llegar a esta playa. A 57 Km de Compostela, se sitúa muy cerca del Centro de Investigación Marítimo de la Xunta y, justo al principio, asoman varias islas rocosas de pequeño tamaño a las que se puede llegar a nado.

Aguieira (Porto do Son)

El islote con la casa de piedra que cierra uno de los extremos de la playa constituye una de sus fotos más características. Emplazada en la ría de Muros-Noia y de aguas muy tranquilas, en ella desembocan dos pequeños ríos. A 48 Km de Compostela, dispone de todos los servicios.

Ladeira-Dunas (Ribeira)

Praia da Ladeira TURISMO.GAL

Ubicada en la misma ría que la anterior, se trata de una playa virgen localizada a escasos dos mil metros de las dunas de Corrubedo y sus lagunas (hay acceso desde el propio arenal). A 70 Km de la ciudad, no faltan espacios para aparcar, vigilancia, servicio de limpieza y W.C.

Tanxil (Rianxo)

A solo 45 Km de la capital gallega, es otra de las alternativas para desconectar en un arenal de aguas tranquilas y con todos los servicios. Situado en un entrono urbanizado, está rodeado de un campo arbolado con césped y con fuentes de agua potable.