Radiografía del furtivismo: nuevos controles y más concienciación

Se incautaron 9.942 artes menos que en 2022

Gardacostas incrementó las inspecciones un 4,2%

La especie más afectada fue la sardina, con 7.538 kilos, cifra equivalente a la subastada en un solo día en la lonja de Portosín

Agentes de la Unidad Operativa de Gardacostas de Celeiro durante una inspección en una lonja.

Agentes de la Unidad Operativa de Gardacostas de Celeiro durante una inspección en una lonja. / Gardacostas de Galicia

Suso Souto

El Servizo de Gardacostas de Galicia decomisó en lo que va de año 22.183 kilos de diversas especies de pescados y mariscos (471 menos que el año pasado) e incautó 22.173 artes (9.942 menos). Su lucha contra el furtivismo se tradujo también en la tramitación de 410 infracciones (151 menos que en 2022, lo que supone una reducción del 6,7%) tras la realización de 1.688 inspecciones (344 más, un 4,2%).

La Consellería do Mar destaca que estas cifras reflejan el acierto de la nueva estrategia de Gardacostas, consistente en adaptar los controles a las zonas, especies y épocas de más relevancia. Respecto al descenso del número de infracciones, la Consellería señala que “pode vir dado por unha maior concienciación do conxunto da actividade sobre a importancia de erradicar a lacra do furtivismo”.

Especies decomisadas

Del total de especies decomisadas, 10.534 kilos son de pescados; 4.183 de cefalópodos; 3.541 de bivalvos; 2.917 de crustáceos; 635 de equinodermos; 314 de algas y 59 de gasterópodos. El mayor golpe al furtivismo (ya sea por captura o por comercialización ilegal) fue el que propició el decomiso de 3.522 kilos de sardina en la zona de San Vicente-ría de Pontevedra, que incluye A Lanzada, toda la ría de Pontevedra y la de Aldán.

Y es que ésta es precisamente la especie que lidera el ranking de decomisos, con 7.538 kilos en toda Galicia (cantidad prácticamente equivalente a los 8.089 kilos que se subastaron en la lonja de Portosín el pasado día 6 y por los que se facturaron 8.331 euros), seguida del pulpo (3.667 kilos, cantidad muy próxima a los 4.049 kilos que pasaron en la primera semana de noviembre por la lonja de Ribeira, la que más factura por esta especie, y que supusieron unos ingresos de 40.132 euros); la almeja (1.840 kilos, equivalente a los 1.811 kilos de almeja japónica subastados en lo que va de año en Ribeira y por los que se facturaron 19.624 eruos); y la centolla (1.815 kilos, el equivalente a los 1.801 kilos subastados este año en la lonja de Malpica y que generaron unas ventas de 10.531 euros).

En menores cantidade completan la lista la nécora (696), el erizo (635), la raya (347) y el berberecho (277).

Lugares con mayores decomisos

El capacho con las centollas incautadas por la Guardia Civil en el Puerto de Laxe

Un capacho con centollas incautadas por la Guardia Civil en el Puerto de Laxe / Guardia Civil

La mayor cantidad de capturas decomisadas se registró en la zona de la ría de Vigo y la costa de A Guarda (5.043 kilos), seguida de la de Fisterra hasta Porto do Son (4.934 kilos, destacando 1.842 de sardina, 800 de mejilla, 581 de pulpo, 89 de centolla y 93 de erizo); la de Corrubedo y Arousa-Norte (4.018, destacando 1.818 de sardina, 510 de pulpo y 353 de centolla); la de la ría de Vigo y la zona costera de A Guarda (2.467, destacando 695 de pulpo, 659 de almeja japónica, 175 de centolla y 135 de erizo); la del sur de la ría de Arousa (2.154, destacando 852 de almeja japónica, 618 de pulpo y 223 de centolla); la de la ría de A Coruña y la parte sur de la ría de Ares-Betanzos hasta Malpica (1.331, destacando 407 de centolla y 302 de sardina); la de Malpica hasta Fisterra (1.318, destacando 279 de centolla, 174 de mejilla y 27 de raya); la de la ría de Ferrol y la parte norte de la ría de Ares-Betanzos (660, destacando 132 de raya, 114 de centolla y 60 de erizo); la de la costa lucense hasta Punta Frouxeira, en Valdoviño (125, destacando 29 de lubinas); la del interior de la provincia de Pontevedra (120 de berberecho); la del interior de la provincia de A Coruña (9); y la del interior de la provincia de Lugo (4).

En cuanto a estos datos sobre la actividad del Servizo de Gardacostas de Galicia es importante tener en cuenta que tanto en 2020 como en 2021 los balances se vieron muy condicionados por la alerta sanitaria del coronavirus, especialmente durante el estado de alarma y el confinamiento. En ese período era de aplicación también el deber legal de las normas de confinamiento, algo que fue vigilado por los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, y que disuadió de forma importante la actividad furtiva en la costa gallega

A esto se suma el hecho de que los controles por zonas van variando en función de las necesidades y de la planificación que sigue el Servizo de Gardacostas de Galicia para controlar por zonas, épocas y especies de más relevancia para optimizar la efectividad de su labor.

Los datos entre enero y septiembre de 2022 ya mostraron la vuelta a la normalidad en los controles e inspecciones del servicio tras le impacto de la pandemia.

Controles

Los controles por zonas van variando en función de las necesidades y de la planificación para optimizar la efectividad de la labor de Gardacostas, con la que la Consellería do Mar pretende que solo lleguen a la ciudadanía los productos procedentes de los canales legales, los únicos que cuentan con todas las garantías para su consumo, yevitar el daño que provoca la actividad irregular a los profesionales del sector, dada la importancia socioeconómica que las actividades pesquera y marisquera tienen en la Comunidad.

El Servizo de Gardacostas vio renovada parcialmente su flota en los últimos años, por lo que cuenta con medios más modernos para una lucha más eficaz y eficiente contra este tipo de prácticas irregulares.

Dicho servicio cuenta con 2 helicópteros, 23 embarcaciones, 70 vehículos y 146 funcionarios trabajando en la lucha contra el furtivismo.

Según la Consellería, las zonas de mayor impacto del furtivismo son las dedicadas al marisqueo, destacando la localidad boirense de Cabo de Cruz, la ría do Burgo y la ría de Ferrol. El citado departamento autonómico afirma que se puede hablar de la existencia de grupos de furtivos organizados en toda la costa gallega. “Son persoas que manteñen un seguimento moi estreito aos operativos e actuacións realizados por Gardacostas de Galicia”, añade.