Lanzan un artefacto incendiario a la embarcación del presidente de los mariscadores de Aguiño

Manuel Ángel Reiriz puso los hechos en conocimiento de la Policía Nacional

A bordo se encontró un bote de cristal quemado con restos de trapos similar a un cóctel molotov

Lanzan un cóctel molotov a la embarcación del presidente de los mariscadores de Aguiño

J.A.S.

La embarcación del presidente de la agrupación de mariscadores de la cofradía de Aguiño (Ribeira), Manuel Ángel Reiriz González, ha amanecido este martes afectada por el fuego, que ha calcinado la lona de protección y algunos elementos del barco, presumiblemente, tras el lanzamiento de un artefacto incendiario.

El presidente de los mariscadores se percató de lo sucedido a primera hora, cuando acudió a recoger aparejos en la embarcación, aparcada sobre un remolque, y comprobó que un fuego había derretido la lona de protección de la misma, así como afectado al suelo y a otros elementos de la lancha.

De inmediato, puso los hechos en conocimiento de la Policía Nacional, que se desplazó hasta la zona con varios efectivos para recoger pruebas, entre ellas un elemento similar a un cóctel molotov que pudo ser arrojado con fuego a la embarcación. En concreto, se hallaron a bordo un bote de cristal quemado con restos de trapos, lo que hace suponer que los autores del ataque utilizaron un cóctel molotov o un artefacto similar. Está en marcha una investigación.

¿Un ataque motivado?

En declaraciones a este diario, el patrón mayor de Aguiño, José Antonio Santamaría, dijo que "yo también sufro con cierta frecuencia este tipo de daños en mi embarcación y en mi vehículo. Desconozco si en este caso está tras el ataque alguien motivado por algún conflicto o si fue un acto vandálico más, pero, lamentablemente, quienes ocupamos cargos de representación en el sector de la pesca o el marisqueo siempre estamos marcados como objetivos en ese sentido. Y hay gente que es como es". En este sentido, Santamaría mostró su solidaridad con el presidente de la agrupación de mariscadores y pidió que se investigue la autoría de los hechos para que no queden impunes. 

Por su parte, Manuel Ángel Reiriz afirmó, en declaraciones a este diario, que "la persona que intentó quemar nuestra embarcación (que es mía y de mi hermano) no calibró bien las consecuencias de la tragedia que pudo provocar, porque el tanque contenía cincuenta litros de combustible. Afortunadamente, el tanque resistió, pero pudo haberse producido una explosión, y la embarcación estaba pegada a la ventana de la vivienda; pegada a la habitación en la que duermen los niños".

Preguntado sobre si tiene sospechas de quién puede estar tras los hechos, Reiriz señala que "no sospecho de nadie en concreto y no tengo enemigos, si bien es cierto que soy presidente desde hace diez años de una agrupación en cuya directiva se toman decisiones que no siempre gustan a todos, como por ejemplo las limitaciones de días en la extracción de algunas especies marisqueras. En todo caso, hay que dejar trabajar a la Policía Nacional, que es la única que puede orientar sospechas".

Asimismo, valora los daños ocasionados (especialmente en el casco de la embarcación y en los equipos tecnológicos) en aproximadamente dos mil euros. Reiriz añadió que "no es la primera vez que sufro ataques en bienes de mi propiedad. Me rascaron el coche varias veces. Pero esta vez se pasaron, porque no valoraron la enorme tragedia que pudieron haber provocado si se hubiese originado una explosión que acabase afectando a la vivienda".