La Xunta y las cofradías exigen la declaración de zona catastrófica para 'salvar' a los mariscadores

La Consellería do Mar ya presentó la solicitud ante la Delegación del Gobierno

Garantizaría que las ayudas lleguen a todos los afectados

El sector reivindica también un plan de acción para regenerar todos los bancos

Alfonso Villares, izquierda, Daniel Formoso, centro, y José Antonio Pérez, en la reunión en Santiago

Alfonso Villares, izquierda, Daniel Formoso, centro, y José Antonio Pérez, en la reunión en Santiago / xunta

Cofradías y sector marisquero aplauden la decisión de la Consellería do Mar de solicitar ante la Delegación del Gobierno la declaración de zona catastrófica de las rías afectadas por una altísima mortandad de marisco, especialmente de los moluscos bivalvos.

Una solicitud que ya fue registrada el miércoles y que se sustenta en informes elaborados por Meteogalicia, el Intecmar, el Centro de Investigacións Mariñas y el Servizo de Análisis e Rexistros, que certifican precipitaciones en la vertiente atlántica que superaron los 1.000 litros por metro cuadrado entre el 15 de octubre y el 16 de noviembre, lo cual provocó una baja salinidad en los bancos marisqueros gallegos al incrementarse el agua dulce vertida por los principales ríos, como el Eume en la ría de Betanzos, el Tambre en la de Muros-Noia, el Ulla en la de Arousa, el Lérez en la ría de Pontevedra, o el Verdugo en Vigo.

Una medida que, según el conselleiro, Alfonso Villares, implica que “se habiliten las ayudas necesarias para compensar de forma completa e inmediata al sector afectado las pérdidas ocasionadas por la mortalidad severa en las poblaciones de bivalvos de interés comercial”. Resalta además que se trata de una figura que ya fue utilizada por otras comunidades autónomas ante fenómenos análogos, por lo que espera del Gobierno central “la misma sensibilidad con Galicia”.

Es más, añade, “en el caso gallego reviste mayor gravedad, puesto que afecta al medio de vida de muchísimas familias”, por lo que lamenta que “hasta el momento no hubiese ningún contacto por parte del Estado para echar una mano o interesarse por la situación”.

Villares dio cuenta de las gestiones ralizadas al presidente de la Federación Gallega de Cofradías, José Antonio Pérez, y a sus homólogos de las federaciones provinciales de A Coruña y Pontevedra, en una reunión mantenida a última hora del miércoles en Santiago. Pérez Sieira asegura que “é algo que xa viñamos demandando dende as confrarías, porque é fundamental para que todos os afectados poidan cobrar axudas ante o cese de actividade obrigado pola falta de recursos”.

Aunque valoran positivamente el paso dado por la Consellería do Mar, en la reunión también plantearon otras demandas a la Administración autonómica. Entre ellas, que se elabore “un plan de acción ambicioso, porque a mortandade do marisco non é un feito puntual deste inverno, senón que xa vimos detectando un aumento da mesma nos últimos anos, e haberá que avaliar cal é o problema e a partir de aí artellar solucións para repoboar os bancos e garantir o futuro do marisqueo, que é fundamental para toda Galicia”.

Asimismo, plantearon al conselleiro que se estudien también medidas de apoyo a las cofradías, “porque tamén se están vendo perxudicadas por esta situación, xa que os ingresos baixan pero os pósitos teñen que seguir facendo fronte aos gastos diarios”. Otra de las opciones que propusieron “é que se estude a posibilidade de conxelar os pagos da Seguridade Social durante uns meses aos profesionais afectados por este paro forzoso”. Iniciativas que Villares se comprometió a estudiar antes de trasladar una respuesta al sector.

Un mariscador en el inicio de la campaña fallida en la ría de Noia / s. s.

Un mariscador en el inicio de la campaña fallida en la ría de Noia / S.S

Estudio en Arousa

Los estudios previos realizados en la ría de Arousa han constatado que las salinidades por debajo de 15 durante tres días consecutivos causan mortalidades moderadas en poblaciones de berberecho y almeja babosa, pero cuando baja de 5 durante cuatro días esa mortalidad pasa a ser severa, afectando también, aunque en menor medida, a la almeja fina y japonesa.

Fue a partir del 24 de octubre cuando comenzó un paulatino descenso de la salinidad, tanto en superficie como en el fondo, alcanzando en este último valores inferiores a 5, e incluso de 0, el día 4 de noviembre, cifras que volvieron a registrarse los días 11, 12, 13, 14 y 16 de ese mes. Unos datos que, según la Consellería do Mar, son extensibles a las rías de Ares-Betanzos, Muros-Noia, Pontevedra y Vigo, en las que “las estaciones oceanográficas registraron comportamientos similares”.

Esta situación que provocó en losbancos marisqueros de los Lombos do Ulla una mortandad del 87,9% de la almeja babosa; el 76,5% del berberecho; el 44,2% de la almeja fina y el 25,1% de la variedad japonesa.

Santiago Cruz: "Sería bo que a xunta contase tamén cunha partida para estas emerxencias"

El patrón mayor de la cofradía de Noia, Santiago Cruz, considera que “é moi bo” que se solicite a declaración de zona catastrófica das rías, pero asegura que “moitas confrarías pensamos tamén que a Xunta de Galicia debería contar tamén cunha liña de axudas para situacións de emerxencia como a que estamos a vivir”.

Y es que las ayudas disponibles actualmente “non chegan a todos e tardan moito”, explica. De hecho, casi dos meses después de que se produjese el cierre de la campaña marisquera en la ría de Muros-Noia por causas de fuerza mayores, “a día de hoxe case ninguén cobrou a axuda, e as que están chegando fano a contagotas, pero ás familias afectadas seguen chegándolle as facturas todos os meses á casa”, subraya Santiago Cruz. Y además, recuerda, que no todos los afectados pueden acceder a las coberturas disponibles, “xa que moitos non cumpren cos requisitos esixidos”. Por ello, añade, “se a Xunta tivese unha partida para estas catástrofes, poderíase dar unha cobertura a todos os mariscadores”.