La operación por el alijo del ‘Nuevo Furuno’ suma ya nueve detenidos en Boiro, Madrid y Portugalete

A los arrestos del dueño y del tripulante del barco decomisado en agosto en Camariñas con 1.400 kilos de cocaína se añaden los siete de este martes // La Policía Nacional tira del hilo para dar con los suministradores de la droga

Plazoleta que da a la calle Dereitos Humanos, en uno de cuyos edificios se produjo un registro y fue detenida al menos una persona

Suso Souto / Javier Rosende Novo

Suso Souto

La operación policial que permitió el pasado mes de agosto el decomiso de 1.400 kilos de cocaína a bordo del pesquero Nuevo Furuno en Camariñas se desarrolla ya en tres comunidades autónomas. Y es que, a la detención del hombre que tripulaba el barco, Brais Mariño Romero, de 27 años y vecino de Boiro y, en diciembre, del propietario de la embarcación, Luis Alfredo Yáñez Martínez, de 32 años y de la misma localidad, se sumaron este martes los arrestos de otras siete personas, presuntamente vinculadas con dicho alijo, en Galicia, Madrid y el País Vasco.

El Juzgado Número 2 de Corcubión, que instruye la causa, todavía no ha recibido el avance del atestado de la Policía Nacional, pero en principio serían siete los arrestados en Boiro, en el municipio vizcaíno de Portugalete y en Madrid (localidades en las que se practicaron varios registros domiciliarios).

El dispositivo policial desplegado el martes se saldó con la detención de varias personas (en principio tres, aunque este dato no fue confirmado oficialmente) que podrían estar relacionadas presuntamente con el apresamiento del citado pesquero.

Los agentes habían montado a primera hora de la mañana un dispositivo de vigilancia en torno a las calles Estatuto de Galicia, Dereitos Humanos, Fernández Mato y avenida da Constitución. Se da la circunstancia de que en este último vial la Policía Local acudió para retirar con la grúa un vehículo camuflado de la Policía Nacional usado en dicho operativo y que estaba mal aparcado. Ese día se celebraba el tradicional mercadillo semanal en la avenida, y los agentes municipales acudían para retirar un vehículo que estaba en zona amarilla, desconociendo que se trataba de un coche camuflado en labores de vigilancia.

En Boiro se realizaron al menos dos registros este martes en el marco de la operación policial relacionada con el alijo del Nuevo Furuno. Uno fue en una vivienda de uno de los edificios de la pequeña plazoleta que da a la calle Dereitos Humanos, en pleno centro urbano. El otro, en una casa del núcleo de Ferreiros, en la parroquia de Cespón, donde este miércoles algunos vecinos mostraban su asombro al enterarse de que la Policía Nacional había realizado un registro y había detenido a una persona en esa aldea. En esta última vivienda, uno de los policías actuantes sufrió una caída al resbalar y tuvo que ser trasladado en ambulancia a un centro médico, algo que también causó cierto revuelo en la localidad.

Y, así como los residentes en el entorno de la vivienda registrada en el centro urbano sí coincidían al señalar un edificio, algunos vecinos de la aldea de Ferreiros consultados por este diario no parecían tener sospechas con respecto a la persona arrestada allí.

Entrada al núcleo boirense de Ferreiros, en Cespón

Entrada al núcleo boirense de Ferreiros, en Cespón / Suso Souto

La operación, que se abrió a raíz del decomiso de 1.400 kilos de cocaína a bordo del pesquero Nuevo Furuno en agosto de 2023 en Camariñas, continúa abierta y, por el momento, bajo secreto de sumario, para blindar una investigación con la que la Policía Nacional tira del hilo para dar con los suministradores de la droga.

En el apresamiento del buque, que se llevó a cabo en colaboración con el Servicio de Vigilancia Aduanera, había sido detenido Brais Mariño Romero, que tripulaba la embarcación con la droga a bordo en el momento de su apresamiento. Mariño está siendo investigando por un presunto delito de tráfico de drogas a gran escala. El Nuevo Furuno llevaba a bordo 45 fardos de cocaína, de unos 30 kilos cada uno aproximadamente, en bolsas de malla.

El anterior propietario de la embarcación se la había vendido hacía unos meses a Luis Alfredo Yáñez, quien, al parecer, residía en la localidad camariñana. Tras el apresamiento del pesquero, el juez decretó contra él una orden de busca y captura, al encontrarse en paradero desconocido. Finalmente, fue detenido en diciembre en Boiro. Según fuentes próximas a la investigación, habría sido precisamente esa operación de venta del barco la que habría originado las primeras pesquisas.

La operación policial continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones y registros domiciliarios. Se prevé que los arrestados pasen a disposición judicial a lo largo de la jornada de este jueves.