Una marisquería, epicentro de la trama. El 10 de enero, Koldo ya sabe que le están investigando y la Guardia Civil le fotografía. Allí queda con dos personas y después también se ve con José Luis Ábalos. De este encuentro y de una conversación telefónica los investigadores y el juez consideran que Ábalos y el empresario Jacobo Pombo fueron los intermediarios que quisieron utilizar los investigados para intentar que el Gobierno balear del PP no reclamara a la empresa el lote de mascarillas entregadas y que no cumplían con las especificaciones del contrato. El exministro niega que jugara ese papel y reconoce que la situación con el contrato de Baleares es distinta.