Familias gallegas se movilizan en redes sociales en contra de las pantallas y los libros digitales en las aulas

Varias ANPAS exigen la supresión de E-Dixgal, el programa de la Xunta que sustituye a los manuales

“Hay niños que llegan al instituto sin saber hacer esquemas, un resumen o memorizar”, apuntan padres y madres

Alumnos del CEIP Mestre Vide, en Ourense, utilizando ordenadores en el aula durante la pandemia

Alumnos del CEIP Mestre Vide, en Ourense, utilizando ordenadores en el aula durante la pandemia / Iñaki Osorio

En Galicia, un total de 64.200 alumnos repartidos en 630 centros educativos estudian a través de un ordenador. Se trata de E-Dixgal, un programa puesto en marcha por la Xunta de Galicia que facilita el acceso a los libros y a los materiales académicos a través de plataformas digitales. Su uso, que se extiende desde quinto de primaria a cuarto de la ESO, lleva años instaurado en el sistema educativo. No obstante, es ahora cuando los padres y las madres empiezan a tomar conciencia sobre el asunto. Motivados por el “bombardeo de información”que alerta sobre su uso y otras iniciativas centradas en la prohibición de los teléfonos móviles, exigen la regulación de las pantallas en los colegios.

“La impresión que tenemos desde las ANPAs es que, cada vez, el grupo de padres y madres que exigen una respuesta sobre el uso de dispositivos electrónicos es mayor”, explica Vanesa Prieto, presidente del ANPA del colegio Quiroga Palacios, en Santiago. Para ella, más que buscar directamente la prohibición, las familias manifiestan preocupación. “Conscientes de los problemas en los que puede derivar, es ahora cuando están empezando a tomar una postura al respecto”, manifiesta Prieto.

Considera que todavía es un movimiento incipiente acelerado por las infrormaciones publicadas últimamente en los medios de comunicación. También por otras iniciativas, como el grupo de WhatsApp de 500 personas que se organiza, ahora a través de Telegram, para buscar soluciones al uso de los smartphones en los patios de los colegios. Ella, también miembro de esa comunidad, ve como progresa el movimiento. “En ese grupo, además de hablar sobre los móviles, las familias también se preocupan por las tablets y ordenadores que usan los niños en clase”, continúa.

Las ANPAS exigen medidas

En Galicia ya hay colegios que se han pronunciado sobre el tema. El más reciente es el CEIP A Ramallosa, en Teo. Después de varias reuniones entre los padres y las madres, desde el ANPA emitieron un comunicado para exigir medidas. Alegan que las pantallas empeoran la compensión lectora, la capacidad de concentración e incrementan los problemas relacionados con la visión y el sueño. “O uso do programa E-Dixgal obrigou ao alumnado a traballar gran parte do horario lectivo pegados ao ordenador. O equipo informático é tamén ferramenta de traballo cando regresan á casa, xa que é neste soporte no que atopan os contenidos obxecto de estudo en cada un dos cursos”, señala el comunicado.

Paula Bolaño, secretaria del ANPA del colegio, explica que en los dos últimos cursos de primaria el 100% de las asignaturas se imparten a través del programa. “Falando coas nais, empezaron a vir queixas de que os nenos chegaban ao instituto sen saber facer esquemas, un resumo ou memorizar”, indica, alegando que “o E-Dixgal é moi básico, un PDF nunha pantalla e os examen son tipo test”. Se pronuncia a favor de la tecnología, pero no considera que el sistema entre dentro de esa categoría. “Non estamos en contra da dixitalización. Sabemos que o futuro que van ter os nenos é traballar con ela. Pero o E-Dixgal non é tecnoloxía, é un PDF nunha pantalla. O que non queremos é que pasen oito horas diante da tablet ou do ordenador para ler un libro. Ao final, o que fan moitas familias é imprimir os temas”, alega Bolaño. Por eso piden “unha clase de informática real”, en la que los alumnos aprendan “o que é un Excel, que saiban facer unha búsqueda e a manexarse nas páxinas web”.

"Non estamos en contra da dixitalización. Pero non queremos que os nenos pasen oito horas diante da tablet ou do ordenador para ler un libro"

Paula Bolaño

— ANPA del CEIP A Ramallosa (Teo)

No es el único colegio en Galicia que se ha posicionado al respecto. Este mismo mes, casi 70 familias del CEIP López Ferreiro, también situado en Santiago de Compostela, presentaron un escrito ante la directiva del centro para que a partir del próximo curso se prescinda del programa educativo y se recuperen los libros de texto tradicionales. Los firmantes alegaban problemas en el aprendizaje, en la visión y en el sueño. No obstante, la decisión final es del claustro. “O profesorado está dividido. Había algúns que preferían libros, pero se eliminas o sistema do E-Dixgal quedas sen axuda para mercalos”, explica Paula Bolaño.

Aunque el formato de los libros sea digital, la decisión de hacer los deberes en ordenador o en papel es de cada maestro. “A man soamente fai as tarefas de matemáticas e inglés. O resto vai por ordenador”, explica Silvia Gómez, madre de un niño que cursa quinto de primaria. Para ella, uno de los problemas es que, una vez termina de estudiar, en su tiempo de ocio, sigue utilizando el dispositivo. Hablando con otros padres y madres, Gómez nota que cada vez hay más preocupación. “É un colexio pequeno, dunha sola liña, pero na clase sempre falamos do mesmo. Creo que todos preferimos que se supriman os ordenadores”, concluye.