Con sentido común

Las elecciones, cosa de todos

Alfonso García

Alfonso García

Supongo que los asesores áulicos del PP habrán aprendido la lección del fatal triunfalismo del 23-J, tras el debate televisivo entre Sánchez y Feijóo, y dejarán de considerar a Vox como el adversario a batir –de este último podríamos decir lo mismo.

Nada mejor que mostrar los cambios experimentados en Galicia entre los años 2014 y 2022:

–La deuda pública de Galicia ha aumentado en un 20 %, la de las comunidades autónomas un 33% y la del Estado el 38 %.

–Los presupuestos generales han crecido un 60 %.

–La tasa de parados se redujo en un 50 % (de 263.000 a 131.000), en España en un 47 %.

–El PIB per cápita creció un 26 %, en España un 24 %.

–El gasto en sanidad por habitante/año creció un 42 %, hasta situarse en 1.742 euros. Los sanitarios por 1.000 habitantes crecieron un 21 % hasta situarse en 3,83 por cada 1.000 habitantes, la media nacional es de 3,50 sanitarios.

–El gasto en educación por habitante/año creció un 34 %.

Estos son los logros, obviamente hay muchas cosas por hacer.

El BNG habla de promesas y poco o nada de sus objetivos ideológicos: 

–Derecho de autodeterminación y consideración de Galicia como nación. Coherentemente, propone relaciones internacionales propias, presencia de Galicia en las instituciones internacionales y europeas y política exterior propia.

–El Tribunal Constitucional dejaría de ejercer funciones sobre Galicia, que tendría poder judicial propio. 

–Medidas económicas claramente intervencionistas; citaré sólo la creación de una banca pública gallega, medidas disuasorias para el traslado de empresas domiciliadas en Galicia y el reiterado eslogan “que pague más quien más tiene”. 

–Capacidad para implantar una política fiscal, Seguridad Social y sistema de pensiones propios. “La sostenibilidad de las pensiones es una cuestión de voluntad política, no de viabilidad económica”; no explican cómo afrontarán ese gasto en una Galicia envejecida-pensionista y la tasa de natalidad más baja de España. 

–Sobre el uso de nuestra lengua, no hay sorpresas: deberá extenderse en todo momento, en todo lugar y en todas las instituciones.

“Cuando las barbas de tu vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar”.

El programa del PSOE se basa en la crítica: “Van a hacer en cuatro años lo que no han hecho en quince”, queremos “no perder más oportunidades para Galicia” y cartelería sobre el Prestige –¡siguen en el año 2002!– y las bolitas de plástico. Los gallegos que han votado al PP por mayoría absoluta durante los últimos 14 años, se han equivocado. 

Habrá que decidir entre el realismo de lo logrado, los delirios nacionalistas de los que no hablan y la crítica vacua. Dicho de otra forma: entre lo posible y la quimera.