Opinión | FIRMA INVITADA

No progresan adecuadamente

EN LAS ETAPAS INICIALES de la educación a los alumnos en lugar de ponerles una nota numérica para calificar su rendimiento se les indica si progresan adecuadamente o no en las determinadas áreas. Hay personajes e instituciones que en algún aspecto de su actividad se les podría calificar con la misma anotación. No se trataría de calificar globalmente toda su actividad sino solamente algún aspecto. Eso podría inducir a los afectados a que pusieran más ahínco en ese aspecto para así mejorarlos. Pongamos algunos ejemplos.

 Empecemos por la actividad del Consejo del Poder Judicial. Este Consejo, formado por miembros que en su mayoría tienen el plazo de su mandato caducado desde hace años, ha tenido una actividad intensa en asuntos que en principio no eran de su competencia o como mínimo no entraban en las competencias explícitamente asignadas. Así se pronunció en contra de la ley de amnistía incluso antes de que fuese aprobada por el Parlamento, e incluso antes de que fuese remitida a él. Posteriormente a requerimiento del Senado también se pronunció en contra. En las dos veces, algunos de sus miembros no estuvieron de acuerdo por alejarse de las competencias asignadas. Aludían que existía un tribunal, el Tribunal Constitucional que de acuerdo con el derecho era el órgano juridicional competente. Hace tres años el Gobierno envío al Consejo del Poder Judicial una ley, la ley de enjuiciamiento criminal, para su informe reglamentario. Han pasado tres años sin que el Consejo haya remitido el requerido informe. Es cierto que por medio ha habido unas elecciones generales y el Consejo podía estar esperando a que cambiase el Gobierno para no tener que hacerlo. Sin embargo, esta excusa no tiene peso, dado que en todo momento puede estar esperando a que cambie el Gobierno y no hacer ningún informe. El Consejo se distrae en muchas cosas y no hace los deberes, no progresa adecuadamente. 

 Un segundo ejemplo, concierne al estudio del inglés del líder de la oposición Alberto Núñez Feijóo. Antes de las elecciones del 23 de julio, al ponerse de relevancia la necesidad de que cualquier líder europeo hablase alguna lengua extranjera, en especial el inglés, para entenderse con el resto de líderes y moverse con eficacia en las instituciones europeas. Núñez Feijóo dijo que estaba dedicado a su estudio pero que el anuncio anticipado de las elecciones le imposibilitó el dominarlo. Ahora en marzo, en la reunión del Partido Popular Europeo, hemos visto cómo todos sus líderes pronunciaban discursos en inglés con la excepción del español. En su reunión con la presidenta Ursula Von der Leyen se reían mucho delante de los focos mediáticos, pero no hablaban. Fuera de las cámaras, suponemos que hablarían algo aunque fuese con el traductor. En la reunión con el líder del Partido Popular europeo, se veía agachado a González Pons al lado de Núñez Feijoo, sirviendo en voz baja de traductor entre los dos líderes. Resumiendo, en inglés, el líder Alberto Núñez Feijóo no progresa adecuadamente. Sin embargo, tiene el acicate para hacerlo dado que al ser el único de los líderes europeos que no lo domina tiene que pasar cierta vergüenza cuando sale de España.