El gran desconocido

El síndrome de empeoramiento vespertino afecta a un tercio de los enfermos con demencia

En Galicia casi 70.500 personas sufren este tipo de enfermedades. La más habitual es el Alzheimer

Una enferma de Alzheimer descansa en una sala del centro de día / domenech castelló

Una enferma de Alzheimer descansa en una sala del centro de día / domenech castelló / adriana quesada

Adriana Quesada

El 'Diario de Noa' es una de esas películas que han conseguido hacer llorar a casi todos los que se atrevieron a verla. A pesar de la trama y un inicio en el que el protagonista arriesga su salud física colgándose de una noria para pedirle una cita a la protagonista, realmente la película trata de un hombre que relata su historia de amor a su mujer, quien padece Alzheimer. Sin embargo, la presencia de esta enfermedad no solo está en el cine, sino que tambien se encuentra en el día a día de millones de personas a lo largo del mundo.

Este jueves se celebra el Día Mundial del Alzheimer, ya que “la demencia es el resultado de diversas enfermedades y lesiones que afectan al cerebro. La enfermedad de Alzheimer es la forma más común y puede representar entre un 60% y un 70% de los casos”, aseguran desde la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Según señala la Federación de Alzheimer de Galicia, cerca de 70.500 gallegos padecen esta enfemedad. Entre estos se encuentran el 12,5% de las personas mayores de 65 años y el 31,25% de las mayores de 85 años. Desde el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, en su Plan Integral de Alzheimer y otras Demencias (2019-2023), aseguran que: “El abordaje de las demencias es una prioridad de salud pública y un problema social y sanitario de primer orden. Se ha convertido en la gran epidemia silenciosa del siglo XXI y en el gran reto para la sostenibilidad de cualquier sistema social y sanitario”.

A pesar de los datos, que muestran que muchos gallegos están afectados por esta enfermedad, y el hecho de que no son pocas las campañas de sensibilización en torno a ella, lo cierto es que uno de los síndromes más habituales que sufren los pacientes con Alzheimer es un gran desconocido: el síndrome vespertino.

Síndrome vespertino

Viene siendo un estado confusional, un episodio extraño, adverso, que se da a partir de finales de la tarde. En ese estado se suelen agravar los síntomas, sobre todo los conductuales y afectivos”, explica Taida Sánchez, psicóloga de la Asociación Galega de Axuda aos Enfermos con Demencia Tipo Azlhéimer (Agadea).

A pesar de que no hay una cifra justa, es algo habitual entre los pacientes con Alzheimer y se calcula que lo sufren entre un 20 y un 30% de los mismos. “Suele darse en fases intermedias de la demencia, ni al principio ni cuando nos encontramos en una fase muy avanzada de la enfermedad”, asegura la psicóloga.

Es habitual que las personas de mayor edad tengan problemas para dormir profundamente o varias horas seguidas. Este hecho sumado a que sufran algún tipo de demencia, empeora la situación. “De alguna manera, está relacionado con los ritmos circadianos –cambios físicos, mentales y conducturales que se repiten cada 24 horas–. Hay un desajuste, se reducen los niveles de melatonina... Son alteraciones en cosas muy relacionadas con la higiene del sueño”, explica Taida Sánchez.

Pautas para mejorarlo

El síndrome vespertino causa, sobre todo, agitación y ansiedad en las personas que lo sufren. Sin embargo, para llevarlo mejor se pueden seguir una serie de pautas. Según Taida Sánchez, “hay una parte farmacológica que, si el médico considera necesaria, hay que tener en cuenta”, pero también hay otras formas de mejorar la situación.

Hay que ofrecer una rutina a estas personas, es importante que tengan pautados horarios de comida, sueño, actividad...”, explica. Además, también es relevante que mantengan una vida activa y estén estimulados cognitivamente. Para ello, se puede animar a que tengan una vida social activa y se expongan a la luz natural.

“Además, si sabemos que esto le pasa a uno de los pacientes lo mejor es anticiparnos observando los desencadenantes y minimizándolos”, explica la psicóloga. Por otro lado, desde las entidades también recomiendan que la persona tenga presentes elementos familiares “que puedan estimular la memoria biográfica y darle distracciones, ya que razonar con él o ella puede no ser primordial así que puede redirigirse la atención a otra actividad”.