UCAM MURCIA 94 - 81 MONBUS OBRADOIRO

Décima derrota consecutiva del Obradoiro en Murcia que se la jugará en el derbi

El equipo de Moncho Fernández perdió con todo merecimiento y acabó pagando su dificultad para anotar

Se le acaban las balas de la permanencia al Obradoiro, que suma una nueva derrota en el feudo del potente UCAM Murcia

Se le acaban las balas de la permanencia al Obradoiro, que suma una nueva derrota en el feudo del potente UCAM Murcia / Área 11

Área 11

Se le acaban las balas de la permanencia a un Monbus Obradoiro que en feudo del potente UCAM Murcia tampoco fue capaz de poner fin a la nefasta racha de resultados por la que atraviesa y suma su décima derrota consecutiva. Esta vez y a diferencia de no pocas de las anteriores, los de Moncho Fernández perdieron con todo merecimiento y apenas si pudieron competir ante el equipo de Sito Alonso, que al paso por los vestuarios para el descanso ya había sentenciado el resultado por mucho que la segunda mitad fuera más igualada.

Con Kovliar al mando y Tinkle y Zurbriggen descartados en la grada, el equipo de Moncho Fernández no comenzó bien en el Palacios de los Deportes murciano, pues en el comienzo Radebaugh y Sant-Roos acertaron de tres muy rápido y un 8-0 de parcial inicial sin duda no era una buena noticia. Aunque desde el triple con Mendoza, casi tres minutos tardaron los gallegos en inaugurar su marcador, pero después reaccionaron sin tardanza y el equipo jugó a muy buen nivel en defensa (10-8 en el ecuador del cuarto).

Aunque con eso no bastaba, porque en la segunda mitad de la manga en el golpe y sin ninguno de los dos contendientes acertados desde el perímetro cualquier detalle resultaba determinante (18-15 en el 9´) y el Obradoiro acabaría pagando su dificultad para anotar en un minuto final donde los de Sito Alonso sí tuvieron buenas ideas (22-15).

El segundo comenzó a muy buen ritmo, con los dos buscando la carrera en todo momento y mayor acierto pese a la velocidad de las posesiones (29-21 en el 2´). Sin embargo había que mantener el ritmo, porque entrar en el golpe a golpe ante un rival con el potencial anotador del UCAM Murcia y no tener buenos porcentajes de acierto (2/14 en el triple) era poco menos que un suicidio. En cuanto la ventaja murciana comenzó a aumentar el Monbus Obradoiro se vio obligado a arriesgar y entonces entraron en juego las pérdidas y las contras, algo donde el equipo rojillo es todo un especialista (37-23 en el ecuador de la manga y TM de Moncho Fernández).

De vuelta a pista Pustovyi la metió para abajo, pero todo quedó en una acción aislada a una estrategia tras tiempo muerto, porque los locales jugando felices a la carrera irían dejando cada vez mejores sensaciones (42-25 en el 7´). La situación era crítica y Pustovyi se salió de lo habitual para encestar de tres (Por entonces 11 puntos), pero con eso no alcanzaba y era indispensable la aportación de los compañeros. Pero no la hubo y en un final que un desaparecido Timma no jugó al ver la tercera falta la máxima local alcanzaría el +19. Al descanso 47-30.

El Obradoiro apenas si pudo competir ante el equipo de Sito Alonso, que al paso por los vestuarios para el descanso ya había sentenciado el resultado

El Obradoiro apenas si pudo competir ante el equipo de Sito Alonso, que al paso por los vestuarios para el descanso ya había sentenciado el resultado / Área 11

En el reinicio y en menos de un minuto un parcial local de 5-0 con triple incluido de Ennis significaba un +22 y la obligación de Moncho Fernández de parar el juego. Sin embargo de nuevo en pista nada bueno se hacia esperar, porque con un 4/17 en el triple y un 10/20 en el tiro de dos resultaba imposible competir contra un rival de la talla del UCAM, que llegaba quinto con racha de cuatro consecutivas y a una victoria de la cuarta plaza que da derecho al factor pista. Sin una respuesta convincente de los gallegos el reloj comenzó a correr veloz y que Pustovyi siguiera aportando o que un Howard, que había fallado liberado casi todo lo tirado en la primera, metiera un triple desde su casa apenas significaron nada. De hecho en ese momento Ennis respondió de inmediato a la afrenta y la renta murciana se mantendría inamovible en el siguiente tramo de un partido donde cada vez había menos tensión competitiva pues el vencedor ya estaba decidido (64-44 en el 7´).

De ahí al final el Obradoiro hasta sumó un parcial de 0-5 con Timma anotando su primera canasta e incluso después mejoró en lo ofensivo, pero siempre pareció que fue más por relajación de su rival que por sus propios méritos. En todo caso a la conclusión 70-53.

En menos de un minuto un triple de Scrubb y otro seguido de Howrad abrieron un sitio a la esperanza en el último acto (70-59). Suficente para que Moncho Fernández tocase a rebato, mientras que Sito Alonso comenzaba a inquietarse. El Murcia metió una marcha más y el Obra no se escondió entrando ambicioso en el riesgo, pero la lógica se impuso y cometiendo más errores que su oponente perdió otra vez no pocas posesiones (81-67 en el 5´).

Tampoco entonces bajaron los brazos los de Moncho Fernández, incluso Howard maquilló tanto su estadística que terminó como máximo anotador, pero eso ni siquiera les evitó sufrir una abultada derrota con unos minutos finales sin nada de emoción. Al final 94-81.