De romanos para promocionar un nuevo Camino a Santiago

Una docena de peregrinos vestidos de romanos llega al Obradoiro para promocionar un nuevo Camino a Santiago

De romanos para promocionar un nuevo Camino a Santiago

De romanos para promocionar un nuevo Camino a Santiago / Jesús Prieto

N.S.

Vestidos de romanos, una docena de peregrinos portugueses llegaron este domingo a la Praza do Obradoiro. Por etapas durante los últimos fines de semana han recorrido los 240 kilómetros que separan Braga de Compostela por el Camiño de Santiago da Geira Romana e dos Arrierios. Con la iniciativa buscan promocionar una ruta, que ya fue reconocida por el Cabildo de la Catedral en marzo de 2019, pero que está a la espera de que la Xunta le otorgue el calificativo de oficial.

Entre los caminantes que culminaban su peregrinación se encontraba el alcalde del Ayuntamiento de Terras de Bouro, Manuel Tibo, que se sumó a la última etapa. “Este municipio pasa muy cerca de la calzada romana da Geira y todos tenían ya los trajes de romanos, la idea es promocionar esta nueva ruta y promover su recuperación”, explica Carlos da Barreira, miembro de la Asociación de Amigos da Geira e do Camiño dos Arrieiros.

El proyecto de recuperación de este nuevo Camino de Santiago se inició en el año 2004. En 2017 se publicó la ruta, que usa la calzada romana da Geira en su tramo portugués y atraviesa el parque natural do Geres-Xurés. De Braga avanza hacia el norte hacia Portela do Homen para llegar a Lobios (Ourense). Se adentra nuevamente en tierras portuguesas para alcanzar Castro Laboreiro, prosigue hacia Rivadavia y Soutelo de Montes, para culminar en Santiago tras pasar por A Estrada y Pontevea. En unos 10 días, a una media de 24 kilómetros por jornada, se completa la ruta. Desde 2017 ya la han recorrido unas 3.000 personas, según los datos de la Asociación de Amigos da Geira e do Camiño dos Arrieiros.

“Es un camino que se recomienda a los amantes de las caminatas, es duro, pero merece la pena”, explica Vitor Cunha, uno de los peregrinos que completó todo el viaje desde Braga. Aunque al Obradoiro arribaron con casco, escudo, lanza y capas rojas, Cunha desvela que se disfrazaron “a dos o tres kilómetros” de entrar en la ciudad. “La experiencia ha sido muy buena, nos paraba la gente y quería saber por qué íbamos de romanos y sacarse fotos con nosotros”, indica el vecino de Terras de Bouro.

De romanos para promocionar un nuevo Camino a Santiago

De romanos para promocionar un nuevo Camino a Santiago / Jesús Prieto

El municipio portugués ya alberga un museo dedicado a la calzada romana que lo atraviesa. También conocida como Via Nova o Via XVIII del Itinerario de Antonino, la Geira es una calzada que unía las ciudades de Bracara Augusta (Braga) y Asturica Augusta (Astorga). A lo largo de los 30 kilómetros posee la mayor concentración de marcos miliarios epigrafados del noreste peninsular. Muchas de sus inscripciones están datadas entre el final del siglo I y el siglo IV después de Cristo. Muy cerca de esta ruta, ya en tierras gallegas, se encuentra Aquis Querquennis, el complejo arqueológico romano formado por un campamento y una mansión- viaria, situado en la parroquia de Baños de Bande, a orillas del río Limia en el embalse de las Conchas. El campamento se estableció precisamente para la construcción de la Via XVIII. Estuvo ocupado entre el último cuarto del siglo I hasta los años 20 del II.

Tras abandonar la Geira, se conecta con parte del Camiño dos Arrieiros, una ruta centenaria entre Ribadavia y Pontevedra que durante siglos fue utilizada como vía de comunicación para el transporte de vino a la costa y de productos del mar al interior. “Todavía no hay ningún albergue, pero no es difícil encontrar alojamiento”, indica Cunha.

Estudio del CSIC

“Está en estudio para su oficialización por la Xunta de Galicia, junto con otras nuevas rutas en un proyecto que se llama Neocaminos”, explica Da Barreira. El Instituto de Estudos Galegos Padre Sarmiento, perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) es la entidad encargada de realizar el análisis histórico para decidir si se convierte en un nuevo Camino de Santiago.