La consulta del viajero del CHUS administró más de 800 vacunas en lo que va de 2023

El 15% de la demanda de este servicio de Medicina Preventiva es por motivos profesionales

Las más aplicadas son la de la hepatitis A, la fiebre tifoidea y la fiebre amarilla

El destino más habitual sigue siendo África

Una enfermera de Medicina Preventiva del CHUS administrando una vacuna a un viajero, junto a Cristina Fernández, la jefa del servicio

Una enfermera de Medicina Preventiva del CHUS administrando una vacuna a un viajero, junto a Cristina Fernández, la jefa del servicio / lorena rey

La consulta del viajero del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), que ofrece formación y da recomendaciones de viajes internacionales, empieza a recuperar su demanda tras el coronavirus. Desde el mes de enero de 2023 y hasta el pasado viernes se han administrado un total de 813 vacunas. Justo el año previo a la pandemia se administraron 2.331, la cifra récord desde el 2015, y en el 2020 la cifra descendió hasta las 620. Ya al año siguiente fueron 352 y el año pasado se remontó hasta las 1.313, según los datos facilitados por la jefa de servicio de Medicina Preventiva del CHUS, Cristina Fernández, servicio encargado de la consulta del viajero.

La edad media de las personas no ha variado en los últimos años, y se sitúa alrededor de los 35 años. En referencia a la distribución por sexo, hay un 50 % de hombres y otro 50 % de mujeres.

El destino más habitual es África, permanece así todos los años, probablemente porque ahí se suman los que están trabajando allí o que se embarcan en rutas por esa zona, seguido de lugares de Asia”, comenta en conversación con este medio Cristina Fernández.

La mayoría de las vacunas en estos casi siete meses se han dado por vacaciones organizadas (387). Por vacaciones no organizadas, es decir, realizadas por cuenta propia, son 173; a nivel profesional, 120; por cooperación, 35; por visitas familiares o bien el desplazamiento a casas particulares, 57, y otras razones, con mayor peso de los estudiantes, 38.

Las vacunas administradas más frecuentes son la de la hepatitis A, la fiebre tifoidea y la fiebre amarilla. La última, que se pone una única dosis en toda la vida, es exigencia internacional en muchos países y para su uso hay que abonar la correspondiente tasa del Ministerio, de unos 20 euros. “En este momento estamos pidiendo al Ministerio de Hacienda disponer de un datáfono para su cobro”, manifiesta la jefa del servicio de Preventiva del CHUS, quien detalla que por el momento si el viajero ya si la persona sabe que necesita la vacuna de la fiebre amarilla para entrar en un país “se le facilita el enlace del Ministerio para que cuando venga traiga el papelito conforme ha pagado la tasa o bien puede hacerlo en un cajero y facilitarnos el justificante”. Las otras dos vacunas están financiadas por Sanidade.

A mayores, este año ha salido la vacuna contra el dengue, infección que se transmite a través de la picadura de un mosquito infectado. Cristina Fernández detalla que todavía no está financiada, pero ya está disponible en las farmacias.

Funcionamiento del servicio

Cualquier persona que vaya a realizar un viaje internacional puede pedir cita, telefónicamente o bien a través del correo electrónico disponible en la página web del servicio de Preventiva del CHUS y se le da la cita. “Recomendamos a la población que la pidan con una antelación de al menos un mes porque necesitamos una ventana para que las vacunas que administramos tengan efectos de respuesta inmunitaria”, comenta. Esto se traduce en que la persona debe responder produciendo los anticuerpos y la protección para realizar el viaje.

Sobre el funcionamiento, la doctora explica que cuando se adjudica la cita, la persona llega al servicio y el médico analiza el tipo de viaje. “En base al país o zona del país donde acude, se hace una valoración del tipo de vacuna que necesita la persona”, dice, siendo el centro de referencia a nivel mundial el CDC, Centro para el Control y Prevención de Enfermedades, que es el que tiene las alertas internacionales más actualizadas. En base a esas recomendaciones, “se le da las pautas de las vacunas que administramos en el servicio o se les da receta para que compren el medicamento en la farmacia”.

Asimismo se facilitan unas recomendaciones de higiene y alimentación, según los países y la situación endémica y epidémica actual.

Hay una consulta de enfermería que es la que se encarga de administrar las vacunas ya en la primera cita. “Si no disponemos del vial en ese momento, se cita al viajero para más adelante, igual que si se necesitan segundas dosis”, aclara.

Sobre el mayor o menor conocimiento de la sociedad sobre este servicio, Cristina Fernández considera que “es probable que la gente que hace viajes internacionales de forma habitual lo conozca”, pero aún así es necesario darle difusión por la importancia que tiene viajar de forma segura. “A raíz del Covid, creo que la gente está mucho más preocupada por la posibilidad de que haya enfermedades permisibles y por lo tanto de protegerse de las que pudieran o de las que tenemos protección en este momento”, considera. Desde el servicio de Preventiva del CHUS inciden en la necesidad de consultar los avisos de Sanidad Exterior y del Ministerio de Asuntos Exteriores antes de viajar a países no habituales, ya que “tienen avisos sobre las precauciones que se deben tomar”.