Abusos en la Iglesia

Los obispos crearán una comisión con expertos que estudie las indemnizaciones en abusos ya prescritos

Incluirá también los casos en los que el agresor haya fallecido

El Arzobispo de Barcelona , El Cardenal Juan José Omella preside la Asamblea Plenaria extraordinaria de la Conferencia Episcopal de España para tratar el tema de la pederastia en la Iglesia.

El Arzobispo de Barcelona , El Cardenal Juan José Omella preside la Asamblea Plenaria extraordinaria de la Conferencia Episcopal de España para tratar el tema de la pederastia en la Iglesia. / David Castro

Patricia Martín

La Conferencia Episcopal Española (CEE) creará una "comisión de arbitraje", conformada por un panel "plural de especialistas", con el fin de que este comité estudie las demandas y posibles indemnizaciones a las víctimas de abusos sexualescuyo caso no tenga recorrido judicial civil, canónico o penal, bien porque haya prescrito o porque el acusado haya fallecido.

La comisión estará formada por expertos en el ámbito jurídico, canónico, médicos y psicólogos y su estructura y composición concreta será aprobada por el pleno de la Conferencia Episcopal que se celebrará en marzo. A su vez, se creará una comisión que hará un trabajo de "baremación", caso por caso, si la víctima reclama una indemnización económica.

No obstante, según ha aclarado el secretario general de la Conferencia Episcopal, César García Magán, en la rueda de prensa posterior a la reunión de la Comisión Permanente, que se ha celebrado esta semana, la intención de los obispos es que el llamado Plan de Recuperación a las víctimas de abusos en el seno de la Iglesia sea "integral" y no se reduzca al plano económico porque supondría una "mercantilización de las víctimas".

La reparación integral

"Hay que respetar el dolor, la herida, dejando libertad al modo de reparación que desee la víctima", ha añadido, incidiendo que algunas querrán una compensación económica pero otras quizá reclamen una ayuda espiritual, psicológica o de otro tipo. "Lo que queremos es poner a la víctima en el centro, que sea escuchada, atendida y obtenga una asistencia personalizada", ha añadido García Magán.

Si el afectado desea ser indemnizado y su caso no tiene recorrido judicial, el dinero será abonado por el acusado o por la diócesis o el instituto de la vida consagrada al que pertenecía el victimario si este ha fallecido, aunque aún no está decidido en qué cuantía, lo decidirá esa comisión de baremación, estudiando caso por caso.

Las cifras

Asimismo, la reunión de la Comisión Permanente ha analizado la última versión del informe 'Para dar luz' sobre los abusos, que engloba las cifras de víctimas que reconoce la Iglesia, así como las aportaciones y recomendaciones del informe del Defensor del Pueblo y de la auditoría elaborada, a petición de la CEE, por el despacho de abogados Cremades & Calvo Sotelo.

Magán ha confirmado que el coste del informe Cremades fue de 1'2 millones de euros y ha defendido "el interés del trabajo", que ha sido "realizado con profundidad y profesionalidad". No obstante, los obispos, que han tenido diversos desencuentros con el bufete, no han hecho suya la auditoría, ni han reconocido como buena la cifra de víctimas que contiene: un mínimo de 2.056, a partir de 1.383 denuncias.

La Conferencia Episcopal publicó parte del informe Cremades en diciembre, dentro de un larguísimo documento de más de 1.000 páginas titulado 'Para dar luz', donde los obispos afirman que hay una gran "dificultad para ofrecer una cifra cerrada en cuanto al número de víctimas y victimarios". No obstante, a la vista de los distintos datos, consideran que los casos de abusos en el seno de la Iglesia son "minoritarios" respecto a las agresiones sexuales a niños en el conjunto de la sociedad porque "no superan el millar"; "asumiendo que la magnitud y gravedad de lo ocurrido ya es extraordinaria con un solo caso".