En el barrio catalán contaban los días y por fin estrenan su ilustre semáforo. Entre los acertijos y la expectación, haciendo honor a sus desastrosos protagonistas, el cruce podría parecer un imán para accidentes, pero no. Cruzar cuándo y cómo se debe, a lo agente secreto de la TIA. Un homenaje al genio de Ibáñez que nunca pasa de moda.