Los temporales lastran la campaña de la sardina, que llegó a pagarse en lonja a menos de 1 € el kilo

La concatenación de temporales está pasando factura a la campaña de la sardina, iniciada hace tres semanas. “De momento, las capturas son escasas, debido al mal tiempo que tuvimos este mes pasado. En la lonja de Ribeira solo se vendieron 80.000 kilos desde que se abrió la campaña el 18 de marzo. El tamaño que se está pescando no es el óptimo; son necesarias entre 16 y 20 piezas para completar un kilo, y no tienen mucho valor comercial. Se paga más la de mayor tamaño”, explica Fernando Carreira, gerente de la lonja de la capital del Barbanza.

Desde el inicio de la campaña, el pasado día 18, la sardina alcanzó en las lonjas gallegas un precio medio de 0,85 euros el kilo (por debajo de los 1,02 euros que se pagaban en el mismo período del año pasado), aunque la media en las lojas de la zona de Arousa se sitúa en 1,01 euros.

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Pero, según confirma el patrón mayor de Ribeira, José Antonio Pérez Sieira, “aunque esta semana la cotización media empezó a repuntar un poco, lo cierto es que estuvo la mayor parte de los días por debajo de un euro el kilo. En alguna ocasión se llegó a pagar incluso a 15 céntimos, que es prácticamente lo que se paga por una bolsa de plástico en un supermercado”.

La cotización máxima registrada hasta la fecha fue de 8,90 euros, ligeramente superior a la del año 2023 por estas mismas fechas (8 €).

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Las consecuencias de la ralentización de las ventas y de la devaluación del producto en las rulas se traduce también en las cifras de facturación. Y es que, mientras que a uno de abril de 2023 ya se habían ingresado 414.073 euros por 405.796 kilos de sardinas, este año las ventas cayeron a la mitad en el mismo período (193.443 euros), mientras que la producción bajó a 227.197 kilos.

Con todo, Pérez Sieira no cree que tras las malas capturas de sardinas estén solo los temporales. “Creo que tendremos que pedir a la Consellería do Mar que se estudie qué está pasando con esta especie, porque puede haber otros motivos”.

El año pasado se comercializaron en las lonjas gallegas 18,7 millones de kilos de sardinas, que acarrearon unas ventas de 17,5 millones de euros, con un precio medio de 0,94 euros y un máximo de 12,40.

Balance por zonas

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La mayor producción se registró en las lonjas de la zona de A Coruña-Ferrol (5,1 millones de kilos y 5,1 millones de euros), seguidas de las de Arousa (4,6 millones de kilos y 5,2 millones de euros), Vigo (3 millones de kilos y 2,2 millones de euros); Muros (2,2 millones de kilos y 1,7 millones de euros); Fisterra (967.768 kilos y 899.368 €); Costa da Morte (772.269 kilos y 595.214 €); Pontevedra (596.033 kilos y 512.910 €); y Cedeira (86.464 kilos y 44.045 €).

La xouba de Rianxo, a 5 euros

Algo mejor les va en Rianxo a los pescadores de la xouba con el arte del xeito. Aunque también las capturas de esta especie son escasas por los temporales, su cotización en la lonja registra una media de 5 euros el kilo, lo que para el patrón mayor, Miguel Ángel Iglesias, “no está mal”. Espera, eso sí, que en el verano se pueda duplicar ese precio. En la actualidad son algo más de una veintena las embarcaciones que capturan xoubas en Rianxo.

Cambio de arte

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Por otra parte, unos 15 mariscadores de Rianxo que hasta ahora se dedicaban a la extracción de almejas, decidieron faenar también a la xouba ante la baja productividad de los arenales.

En cuanto al plan de gestión de la sardina con arte de xeito para 2024, al igual que en 2023, el tope máximo de capturas es de 20 toneladas para el primer trimestre del año. No obstante, en esta temporada la cuota que se asigna por tripulante a bordo y día sube de 50 a 100 kilos, a los que se sumarán otros 100 kilos por barco al día, también el doble de los que recogía la resolución de 2023.

Portosín

En el puerto sonense de Portosín, de momento son cinco las embarcaciones que están yendo a la campaña de la sardina. El patrón mayor, Isaac Gaciño, señala que “la campaña empezó muy mal, con capturas escasas y precios ridículos, pero parece que empieza a repuntar y ya se está pagando a 1,20 euros el kilo”. “Confiamos en que la llegada del buen tiempo reconduzca la campaña”, añade Gaciño.

La mayor parte de los barcos de cerco de Portosín se encuentran faenando en el Cantábrico. Al respecto, Gaciño señala que se trata de 19 embarcaciones que se dedican a la captura de la caballa y la anchoa y que en verano se sumarán a la flota que se dedica a la sardina.