El cerco se encomienda a los intercambios de cupos de sardina tras el cierre de la pesquería

El sector y la Xunta instan al Estado a ampliar las cuotas por ser una especie “estratégica”

Confían en que el informe que publicará el ICES en noviembre confirme la mejoría del estado del recurso para avalar esa demanda

Un grupo de marineros preparando las redes de una embarcación de cerco en el puerto de Ribeira / suso souto

Un grupo de marineros preparando las redes de una embarcación de cerco en el puerto de Ribeira / suso souto / suso souto

Después de que la semana pasada la Secretaría General de Pesca cerrase la pesca de la sardina para el arte del cerco en el Cantábrico y el Noroeste alegando que las cuotas de captura de esta especie están próximas a agotarse, el sector y la Xunta de Galicia claman por una ampliación de las mismas. Y lo hacen argumentando que hay sardina en abundancia, como demuestran las cifras de capturas. Y es que, en lo que va de año, se subastaron en las lonjas gallegas 11.720.980 kilos de sardina, una cifra que supera a la de todo el año pasado (11.461.192 kilos). La facturación en estos casi ocho meses de 2023 fue de 11,3 millones de euros. La cotización media de la especie fue de 0,97 euros y, la máxima, de 12,40 euros.

“Las toneladas son las que son, las que nos pertenecen al Cantábrico y Noroeste. Este año teníamos mucho más. Hay que recordar que tenemos la cuota de la sardina compartida con Portugal. Galicia tiene mucha flota de cerco y este año hay una gran cantidad de sardina, pero, al fallar otras pesquerías, como las de la caballa o el jurel, toda la flota se dedicó a la sardina”, explica el patrón mayor de Ribeira, José Antonio Pérez.

“Hace tres semanas hubo un intercambio de cupos, porque el Gobierno central veía que se estaba agotando la cuota. Conseguimos 2.100 toneladas en total de las de Portugal (al Cantábrico y al Noroeste le pertenecieron 1.700) y en quince días se agotaron, al ir toda la flota a la misma especie”, añade el patrón mayor ribeirense.

En su opinión “hay mucha sardina, aunque no de un tamaño muy grande. Hay mucho medianillo y mucha xouba”. Pérez destaca que “se están haciendo intercambios de cupos con Andalucía para poder seguir pescando”. “La situación es la que es. No nos queda otra. Sabíamos la cantidad que teníamos, más que otros años, pero también es verdad que nosotros lo que necesitamos es pescar”, comenta.

Por su parte, el director xeral de Pesca, Acuicultura e Innovación Tecnolóxica, Antonio Basanta, dijo que “estamos apostando por el aumento de la cuota de la sardina, una especie que no tiene TAC, que tiene una cuota establecida con España y Portugal, que tiene que aprobar la Comisión Europea y que depende mucho de los informes que elabore al respecto el Consejo Internacional para la Exploración de los Mares (ICES). Un informe que tiene carácter vinculante para el establecimiento de las cuotas”.

En este sentido, Basanta explica que “en los últimos años se está observando una buena evolución del recurso, pero tenemos que esperar al 14 de noviembre a que se publique el informe del ICES para corroborarlo y, en base a él, solicitar el aumento de las cuotas”.

“Lo que le pedimos al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación es que, através del IEO y de las campañas que se están haciendo para el seguimiento de esta especie, se ponga especial empeño en tratar de conseguir una mayor cuota, porque las otras especies, en el caso del cerco, o no aparecen o hay dificultades para conseguir la cuota. Y la pesquería de la sardina da un gran rendimiento económico”, añadió.