Un informe del CCG de los últimos cuarenta años alerta de la disminución del gasto público en cultura

 El informe del Consello da Cultura Galega (CCG) 'Corenta anos de cultura galega en estatísticas', que analiza la evolución de la situación sociocultural de Galicia en 1983 con respecto al año 2023, destaca que en los últimos cuarenta años se duplicaron muchos de los hábitos culturales de la ciudadanía pero disminuyó el gasto público.

El documento, que identifica las tendencias, los desafíos, las amenazas y los cambios socioculturales y económicos que se produjeron en las últimas cuatro décadas en el ámbito cultural gallego, revela que se profesionalizó el sector cultural, al duplicarse el empleo, y prácticamente todos los indicadores señalan que los hábitos y prácticas culturales de los hogares de Galicia y de sus habitantes se sitúan por encima de la media estatal.

No obstante, esos indicadores también alertan de que el gasto público en cultura menguó en todas las administraciones.

La mejora de las condiciones de vida, el aumento del tiempo de ocio o el Estado de las autonomías, con la transferencia de competencias en materia cultural, así como el desarrollo normativo, fueron decisivos para que la situación de la cultura mejorase en estos cuarenta años.

Uno de los indicadores básicos es el empleo, que en Galicia sólo se puede contabilizar desde 1999 porque no hay cifras anteriores. Las aproximadamente 36.500 personas que trabajan actualmente en actividades culturales en Galicia son más del doble de las que había a finales del siglo XX; se pasó del 1 % de trabajadores dedicados a actividades u ocupaciones culturales al 3,3%, y todos los indicadores muestran una mayor profesionalización.

Hábitos y prácticas culturales

Según el informe, hay una ciudadanía más activa culturalmente, tal y como muestran los diferentes indicadores que miden los hábitos y prácticas culturales de la sociedad gallega, que confirman esa tendencia positiva.

En este sentido, el más destacado es el de la lectura. En 1985 sólo el 33 % de la población gallega leía libros, mientras que hoy en día llega al 55 %, cifra que, además, está por encima de la media estatal. En la lectura de prensa la diferencia es aún más considerable y el incremento del hábito de lectura en estos cuarenta años es claramente superior en Galicia al del total del Estado.

Otros datos revelan que las colecciones de libros particulares crecieron de manera importante, pues se triplicó el número de libros disponibles por hogar, si bien, desde que hay datos, se sabe que descendió ligeramente la compra anual de libros.

Así mismo, el trabajo señala que los gallegos tienen ahora más instrumentos musicales (se pasó del 5 % al 9 % de la población), dibujan más (del 5 % al 15 %) y escriben más (del 1 % al 8 %), y los pequeños practican más ballet (del 2 % al 6 %).

Con respeto a la tecnología, se indica que si el 9 % de los hogares tenía un ordenador en 1990, ahora lo tiene el 77 %, y recoge también la evolución del cine, con los cines como unidad estructural en una situación de retroceso importante. "Si en los años ochenta era normal ir a ver una película en una sala de exhibición una media de ocho veces al año, ahora es de menos de tres", se indica.

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Las insfraestructuras y las administraciones públicas

En el apartado de infraestructuras culturales y administraciones públicas, el CCG destaca que hubo una mejora significativa de las infraestructuras públicas, que doblaron su número en muchos casos. En 1983 había 6 bibliotecas por cada 100.000 habitantes, mientras que hoy en día hay más de 13, y los fondos que albergan también se incrementaron notablemente.

También se duplicaron las salas de conciertos, salas de exposiciones y museos, aumentando el número de estos últimos por cada 100.000 habitantes de 1,66 en 1986 a 3,15 en 2020.

Con todo, el informe constata que el gasto público en cultura no evolucionó de la misma forma que otros indicadores. "Es evidente que las partidas económicas se incrementaron notablemente, pero la proporción del gasto en cultura con respecto al total del gasto público menguó en todas las administraciones", recoge el documento.

El gasto de la Administración estatal en cultura pasó de sumar el equivalente a 233 millones de euros en 1985 a más de 700 millones en la última anualidad disponible, pero el peso en el conjunto del presupuesto pasó del 0,35 % al 0,21 %. Además, se subraya que el recorte medido en proporción al PIB aún es mayor, ya que pasó de suponer el 0,14 % en 1985 al 0,07 % en 2020.

La Administración local, pese a ser la que soporta la mayor parte del gasto cultural en conjunto, también bajó la proporción de lo que destina a cultura: si en 1985 la cantidad destinada era el 5,37 %, en la última referencia descendió hasta el 4,15 %.

Por su parte, en la Administración autonómica el gasto en cultura en su conjunto descendió del 1,58 % al 0,55 %. "El gasto de la Xunta, que era menor que el de otras comunidades autónomas, pasó del 0,68 % en 1985 al 0,66 % en 2020, el último año del que se dispone del dato del gasto liquidado, lo que significa que en la práctica el Gobierno gallego gasta en proporción lo mismo en cultura ahora que hace 35 años", concluye el informe 'Corenta anos de cultura galega en estatísticas'.