Disfrutar del sol y la naturaleza es el plan perfecto para este fin de semana. Con un febrero más cálido de lo normal, Meteogalicia apunta a que este sábado y domingo Galicia continuará bajo la influencia de las altas presiones con tiempo seco y soleado. Se esperan bancos de nieblas matinales, pero irán dando paso a cielos poco nublados o despejados. Las temperaturas serán muy agradables, normales para las mínimas y continuarán altas para las máximas. Descenderán ligeramente, pero rozarán los 17 grados.
Con esta previsión a la vista, las afueras de Santiago ofrecen una variedad de opciones para quienes buscan conectar con la belleza natural y la historia de la comarca. Desde paseos bajo el radiante sol invernal hasta visitas a emblemáticos pazos y lugares míticos, la agenda está llena de opciones para todos los gustos. Aquí te presentamos cinco planes imperdibles que invitan a descubrir joyas del patrimonio de Galicia a pocos kilómetros de la capital.
As Brañas de Laíño (Dodro)
As Brañas de Laíño son uno de los principales atractivos naturales del Concello de Dodro, un ecosistema único que ha sido testigo de la interacción entre el hombre y la naturaleza a lo largo de los siglos. Este humedal, con una extensión de más de 20 hectáreas, es un refugio para una variada fauna y flora, además de ser un enclave perfecto para realizar actividades al aire libre y gozar de la tranquilidad que ofrece.
El entorno de las Brañas de Laíño está atravesado por diversas rutas de senderismo que ofrecen vistas panorámicas de la ría de Arousa y resultan especialmente atractivas para la observación de aves, tanto migratorias como residentes. Se estima que alrededor de 60 especies de pájaros distintos habitan la zona, lo que resalta la biodiversidad excepcional del lugar y lo convierte en un punto destacado para el avistamiento.
Ponte Ledesma (Vila de Cruces)
Con una mezcla única de arte, historia y una espléndida área recreativa, Ponte Ledesma, en el concello de Boqueixón, promete una experiencia sin igual bajo el sol radiante de febrero.
La ruta hacia Ponte Ledesma, especialmente la carretera AC-960 desde A Susana hacia Ourense, ofrece un viaje con vistas panorámicas del Pico Sacro y viviendas tradicionales que recuerdan el pujante pasado agrícola de la zona. A lo largo del recorrido, el río Ulla se oculta, anticipando la llegada a este destino idílico.
Al llegar a Ponte Ledesma, los visitantes son recibidos por una impresionante casa del siglo XVIII y otras viviendas históricas que añaden un toque pintoresco al paisaje. El puente, construido entre los siglos XVI y XVII, no permite el paso de vehículos no autorizados, preservando así su esencia histórica y arquitectónica.
Una vez en el lugar, los excursionistas tienen la oportunidad de explorar la capilla de San Xoán de Gres y emprender un tranquilo sendero paralelo al río Ulla. Sin embargo, el verdadero tesoro de Ponte Ledesma se revela en su área recreativa de islas, como As Palletas, Os Namorados, Pachín, Da Praia y San Ramón, donde la naturaleza exuberante y la vida silvestre ofrecen un ambiente fascinante.
Illa do Refuxio (Sigüeiro)
El área recreativa Illa do Refuxio se sitúa en una isla en medio del río Tambre, en la localidad de Sigüeiro (Concello de Oroso), ofreciendo un ambiente sereno y apacible para disfrutar al aire libre.
Este espacio cuenta con extensas áreas verdes, frondosos árboles y mesas de pícnic, convirtiéndolo en el lugar ideal para llevar a cabo actividades al aire libre o simplemente relajarse y conectar con la naturaleza.
Adicionalmente, el río Tambre brinda la oportunidad de practicar deportes acuáticos como el piragüismo y la pesca. Asimismo, se disponen de senderos naturales que invitan a explorar la zona y contemplar las hermosas vistas del río y del entorno natural circundante.
Ruta Tambre e Pedra (Trazo)
La Ruta Tambre e Pedra, ubicada en Trazo y con punto de partida en la playa fluvial de Chaián, ofrece una experiencia de senderismo única. Este recorrido de poco más de 15 kilómetros sigue el curso del río Tambre, brindando vistas impresionantes y un encuentro con la historia y la naturaleza.
La primera parte del sendero, de dificultad moderada, lleva a los caminantes desde la playa fluvial de Chaián hasta Ponte Albar, bordeando la orilla del río. Tras cruzar el puente, la ruta se adentra en un ascenso gradual que revela vistas panorámicas del cañón del Tambre y la belleza montañosa de la zona.
El trayecto conduce luego hacia el Muíño de Salgueira, un antiguo molino que además de moler granos, albergaba colmenas para la producción de miel y cera. Estos molinos, aunque ahora abandonados, evocan tiempos pasados llenos de actividad y tradición.
La ruta continúa entre montañas, cambia de río y llega al Chonia, donde se encuentran los Batanes de Oa, antiguas máquinas hidráulicas utilizadas para compactar tejidos.
El recorrido concluye con un paseo por la aldea de Tarrío y la visita a la iglesia de San Cristovo de Xavestre, donde los senderistas pueden disfrutar de la serenidad y la belleza del entorno antes de dar por finalizada esta inolvidable travesía.
Pazo de Santa Cruz de Ribadulla (Vedra)
El Pazo de Ortigueira, también conocido como Pazo de Santa Cruz de Ribadulla, es una residencia histórica ubicada en la parroquia de Santa Cruz de Ribadulla, en el municipio de Vedra. Fue la residencia del Marqués de Santa Cruz de Rivadulla, Alfonso Armada Comyn.
La historia del pazo se remonta al siglo XV, cuando un noble llamado Abraldes, partidario de la infanta Juana la Beltraneja en la guerra de sucesión al trono de Castilla, fue desalojado de la antigua torre de Ortigueira como castigo por su apoyo. Su hijo construyó la Casa de Guimaráns en la parroquia de San Mamede de Ribadulla.
Posteriormente, Juan Ibáñez de Mondragón, un clérigo influyente y adinerado, adquirió la torre de Ortigueira y la transformó en su residencia. Fundó la capilla de la Piedade (conocida como capilla de Mondragón) en la catedral de Santiago, donde también fue enterrado.
El predio de Santa Cruz de Ribadulla fue ampliado y embellecido con viñedos, olivares y huertos. La familia Mondragón mantuvo la propiedad y la fortuna, y en 1681, Andrés Ibáñez Mondragón recibió el título de marqués de Santa Cruz de Ribadulla por el rey Carlos II.
La propiedad es privada y abre sus jardines para visitas según la temporada. Se trata de uno de los espacios botánicos más cautivadores de Galicia, reconocido por su extraordinaria variedad y belleza en flora ornamental, así como por su valor botánico y paisajístico.
La propiedad alberga un conjunto de árboles monumentales que merece mención especial, entre los cuales destacan los paseos de camelias, olivos, boj, magnolias gigantes, helechos australianos, criptomerias, tulipaneros de Virginia, ombúes, robles piramidales, palmeras Washingtonia, así como un naranjo que evoca las antiguas plantaciones de cítricos de la finca.
Durante el invierno, de lunes a sábado, el horario es de mañana y tarde (10h a 13h y de 15h a 18h) Los domingos y festivos, las visitas están disponibles exclusivamente por la tarde. Es importante tener en cuenta que la última visita permitida comienza media hora antes del cierre.
En cuanto a los precios, a partir de febrero de 2024, la entrada es gratuita los lunes por la mañana. Para el público en general, la tarifa es de 8€. Los grupos disfrutan de un descuento de 5€ por persona, con un mínimo de 120€ por grupo. Los niños menores de 12 años entran gratuitamente.
Para las visitas guiadas, se requiere reserva previa con varios días de antelación.
