Compostela se vuelca con las procesiones de la Última Cena y del Jesús Flagelado

En el marco de un ambiente plenamente primaveral, la capital gallega se adentró ayer en el grueso del programa de procesiones organizado por la Junta de Cofradías. Después de un Miércoles Santo que se ha quedado vacío tras la disolución de la Hermandad de Estudiantes y la supresión de su desfile, las cofradías de Santiago retomaron ayer su actividad con el inicio del denominado Triduo Pascual, que concentrará buena parte de las 14 manifestaciones religiosas previstas para esta edición. Lucía todavía el sol cuando ayer, poco después de que finalizará la Misa de la Cena del Señor en la Catedral, salió a la calle desde la iglesia conventual de San Francisco la primera procesión del Jueves Santo, la Última Cena del Salvador, organizada por la Cofradía de la Vera Cruz, con los pasos de la Última Cena, la Virgen de la Vera Cruz y el Cristo Cautivo, acompañados de la banda musical de la Vera Cruz y la Banda Municipal.

Numerosísimos fieles, visitantes y curiosos se dieron cita a partir de las siete y media de la tarde para contemplar el desfile por la rúa de San Francisco y las inmediaciones de la Catedral, y acompañar el desfile en todo su recorrido, que se extendió hasta la praza do Toural. Una manifestación religiosa donde el protagonismo se lo llevó un años más el paso procesional de la Última Cena, una talla del escultor compostelano Juan Sanmartín y Serna, que data del año 1864 y que fue premiada en la Expo Universal de París de 1889.

Además de un nutrido grupo de cofrades y niños que representaron a personajes de la Pasión, también participó en la cita religiosa la Corporación, encabezada por el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, puesto que el paso de la Última Cena es propiedad de la propia ciudad y esta procesión fue recuperada en los años noventa a iniciativa del Ayuntamiento compostelano.

A la hora de cierre de esta edición estaba prevista también la salida desde la iglesia de San Agustín de la procesión del Flagelado, con la cofradía homónima al frente de la misma, una hermandad que, por cierto, siempre sale: llueva, caigan rayos, nieve o haga frío, los cofrades del Flagelado procesionan siempre.

Como de costumbre, la hermandad relizó ayer su Estación de Penitencia con la sobriedad que la caracteriza y con unas calles abarrotadas de cofrades y seguidores de esta peculiar procesión nocturna.

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Sermón del Encuentro

En la jornada de hoy, Viernes Santo, serán cuatro las cofradías que procesionarán por el casco histórico de Santiago. Por la mañana, será el turno de la Cofradía de Nuestro Padre Xesús Nazareno y la Santísima Virgen de los Dolores, que se encargará de realizar el Sermón y posterior procesión del Santo Encuentro. A las 10.30 horas saldrán de su sede, la iglesia de San Miguel dos Agros, con una procesión que bajará dividida por dos recorridos diferentes hasta la praza de A Quintana, donde, a las 11.00 horas, tendrá lugar el Sermón del Encuentro, que se representará con las cuatro imágenes propiedad de la Cofradía: la Virgen de los Dolores, el paso de Jesús Nazareno, la Verónica y San Juan. Una vez finalizado, se retomará la procesión, acompañada de la Banda de Música Municipal de Santiago, para el regreso a San Miguel.

Ya por la tarde, a las 18.00 horas, será el turno de la Ilustre Cofradía de la Quinta Angustia. Una procesión que, desde su barrio, y con una gran afluencia de vecinos y vecinas, acompañará a su imagen hasta el casco histórico. Una vez recogida, a las 20.00 horas, también saldrá la Real e Ilustre Cofradía Numeraria del Rosario de San Domingos de Bonaval con la Procesión del Santo Entierro. Un desfile que se remonta a 1581, en el que participará el arzobispo administrador apostólico de Santiago, monseñor Julián Barrio, y en el que sus cofrades, ataviados con chaqué, acompañarán a la Virgen de los Cuchillos y la Santa Urna con el Cristo Yacente, trazada por Manuel de Leis en 1740 y ejecutada por Tomás Fontenla casi mediado el siglo XVIII.

Para cerrar el Viernes Santo, bien entrada la noche, a las 23.30 horas se abrirán las puertas de la iglesia de Santa María Salomé, de la que saldrá la Virgen de la Soledad. Estará escoltada por personal femenino de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad.

Desfile de los Hermanos

Mañana, Sábado Santo, y como previa del Domingo de Resurrección, la Real Cofradía del Santísimo Cristo de la Unción y Nuestra Señora de la Serenidad, con sede en el Colegio La Salle, se encargará de la procesión de los Hermanos. Una Estación de Penitencia con una alta participación de niños y niñas, dos imágenes procesionales y en la que participa la Banda de la Brilat, que llenará la ciudad de música con sus marchas militares adaptadas para solemnizar desfiles religiosos.

Muchos peregrinos

Por otro lado, en la ciudad ya se percibe una alta afluencia de visitantes, sobre todo peregrinos, que han disparado la entrega de Compostelas a más de 1.500 por día. Además, ayer pudieron verse las primeras colas de este 2023 para acceder a la Catedral en la que se considera la resaca de un Año Santo en el que se batieron todos los récords en cuanto a cifras. Desde enero llegaron a la Catedral 20.275 peregrinos.