Casi 200 solicitudes de viviendas turísticas y solo 49 de licencias de rehabilitación en lo que va de año

El Concello ha recibido en lo que va de año casi 200 solicitudes para la apertura de pisos turísticos y tan solo 49 peticiones de licencia para rehabilitación de inmuebles en el casco histórico. Son datos que ofreció ayer el alcalde y candidato del PSdeG a la reelección en el debate de cabezas de lista que se celebró en el Ateneo de Santiago, que estuvo centrado en dos ejes principales: la recuperación de población en la zona monumental y la reducción del impacto del cambio climático.

En su intervención, Xosé Sánchez Bugallo señaló que las políticas públicas deben “estar encamiñadas a preservar o carácter vivo do casco histórico”; y apuntó que la actuación de los gobierno municipales socialistas de las últimas décadas tuvieron siempre como objetivo optimizar la calidad de los servicios para asentar población en la ciudad histórica, donde actualmente residen 10.074 vecinos, 2.386 en la almendra, según los datos ofrecidos por el alcalde.

Ante un abarrotado auditorio, quiso manifestar que en este mandato ha cumplido con las demandas que le trasladaron las asociaciones vecinales de la zona: “Pediuse a fibra óptica, a peonalización de Mazarelos e un centro sociocultural; penso que as tres cousas están feitas”, dijo. En este contexto, defendió que “hai que pelexar por preservar o carácter residencial”, al tiempo que lamentó “a pérdida de recursos do Consorcio para promover a rehabilitación”.

También dijo que de continuar con el bastón de mando está entre sus planes destinar el 50 % de lo que se recaude con la tasa turística a la rehabilitación de viviendas. Para Bugallo es importante “recuperar Emuvissa, a empresa municipal de vivenda e solo”, así como “completar a dotación de servizos e aproveitar parcelas como a de Xoán XXIII, que está baleira, para construír pisos de aluguer para os universitarios”.

También incidió en la necesidad de “apoiar o comercio, e incentivar sobre todo o comercio que nos interesa”, al tiempo que se comprometió a “revisar o Plan Especial do Casco Histórico, para adaptalo aos tempos e darlle preferencia ao uso residencial fronte ao turístico”.

Sobre este último aspecto también se paró el candidato del PP a la Alcaldía, Borja Verea, quien dijo que “o Plan Especial está esgotado”. El popular sostuvo que “a situación actual do casco histórico é de emerxencia total e dun colapso de deterioro”, al tiempo que manifestó que “as políticas postas en marcha na zona monumental supuxeron un erro, cando non un fracaso”. Con esto, incidió en la necesidad de “repoboar para frear a situación de desertización” de la almendra; y de promover medidas encaminadas a que “as vivendas teñan uns estándares de calidade do século XXI”, porque “se seguimos conxelando a cidade histórica tan so teremos edificios en ruinas”.

Verea prometió “unha transformación total” y un “esforzo” para impulsar la rehabilitación”, que “é imposible que sexa pública, polo que se precisa dunha colaboración das administracións públicas e os propietarios”. Subrayó la necesidad de buscar “unha solución ao problema de aparcamento”, así como impulsar un plan de infraestructuras o facilitar la división de los pisos en apartamentos más pequeños, adoptando medidas que faciliten la accesibilidad a los edificios, la instalación de ascensores y la adaptación de las viviendas a las comodidades actuales.

María Rozas, candidata de Compostela Aberta, proclamó que “queremos un casco histórico vivo, para os residentes, e non un escenario para os turistas”. En este sentido, recordó que CA puso en marcha el mandato pasado varias medias para “recuperar os espazos dos residentes”, como la moratoria de hoteles o el inicio de la regulación de los pisos turísticos, con el objetivo de poner freno a las dificultades de acceso a la vivienda. Como propuestas electorales hizo referencia a la recuperación de la antigua empresa municipal de vivienda, “cun novo rol enfocado a xestionar as vivendas baleiras, promovendo un programa de alugueiro social a prezos económicos”.

Es partidaria de aumentar “as axudas destinadas a mellorar a accesibilidades, a eficiencia enerxética e a dotar de servicios os edificios da cidade histórica”. También se comprometió a “regular as tendas de suvenires, a fomentar o comercio local e a potenciar a Plaza de Abastos cun modelo que garanta os seus usos tradicionais”. Asimismo, aseguró que de hacerse con la Alcaldía recuperará para la gestión municipal el parquin de la Praza de Galicia, “con tarifas reducidas para os residentes e o comercio local e con bonificacións gratuítas para os colexios próximos”.

La candidata del BNG, Goretti Sanmartín, aseguró que hoy en día “non é doado descansar pola noite no casco vello”, al tiempo que apostó por promover “unha cidade viva, que non sexa un parque temático só para os turistas”. Con esto, recalcó la urgencia de “revertir a situación de viviendas e baixos comerciais baleiros”, al tiempo que animó a poner en valor inmuebles como el Pazo dos Irlandeses o la Sala Yago como atractivo para atraer población.

“Temos que desenvolver políticas pensadas na xente que vive aquí, dotar a cidade histórica de servizos e facilitar comodidades do século XXI”, manifestó, antes de comprometerse a recuperar “a oficina de rehabilitación do casco histórico e unha concellería específica para esta área”, a “blindar os comercios emblemáticos fronte as zonas saturadas de comercios de suvenires” o a la creación de un centro de día para los vecinos de la zona monumental.