El presidente de los 14 astilleros artesanales ligados a estas zonas aboga por crear una FP

Plus de protección para el patrimonio litoral mejor conservado en Muros, Outes, Carnota y Ribeira

El Plan da Cultura Marítima aprobado por el Consello da Xunta lanza cien medidas para su conservación

Señala como ‘áreas nai’ debido a su buen estado la muradana, ensenada de Broña, Quilmas y Secada-Touro

Litoral de Quilmas, una de las áreas nai mejor conservadas y que se quieren perpetuar así / Turismo de galicia

Litoral de Quilmas, una de las áreas nai mejor conservadas y que se quieren perpetuar así / Turismo de galicia / M. Manteiga

La Consellería do Mar presentó ante el Consello da Xunta el Plan da Cultura Marítima de Galicia. Horizonte 2030, un documento único y pionero a nivel nacional e internacional que aborda el estado del patrimonio marítimo y las posibilidades de protegerlo y conservarlo a través de cien medidas para que las próximas generaciones puedan disfrutarlo. En el mismo se señalan varias áreas “que teñen núcleos urbanos e unha identidade especial” y cuya conservación es prioritaria por su buen estado. Son Rinlo, Espasante (Ortigueira), Mugardos, Redes (Ares), Quilmas (Carnota), Muros, ensenada de Broña (Outes), zona de Secada-Touro (Ribeira), Combarro (Poio) y A Guarda.

Este documento, fruto de un intenso trabajo y de consultas a personas y entidades de todo el litoral, hace un profundo análisis de la diversidad de bienes inmuebles, muebles y patrimonio inmaterial existente en la comunidad y un centenar de medidas a aplicar antes del año 2030 que contribuirían a avanzar en su conocimiento, preservarlo y ponerlo en valor tanto en Galicia como en el exterior. Este trabajo, realizado al amparo de un convenio de colaboración entre la Consellería do Mar, la Universidade da Coruña (UDC) y su fundación (FUAC), pretende convertirse en una guía y en un punto de partida para que las distintas instituciones y entidades actúen de manera coordinada de cara a proteger su pasado y presente marinero, evitando así que quede en el olvido.

El plan es de suma importancia, toda vez que Galicia cuenta con más de 1.600 kilómetros de costa, tres provincias con mar y más de la mitad de la población (cerca del 55%) vive en la costa. Esta situación hizo que las actividades vinculadas con el mar definieran un gran número de oficios y el propio modo de vida de la gente, dando lugar a una cultura característica y de gran valor. Por eso, el plan pretende convertirse en un instrumento capaz de favorecer la gestión integral de esos vestigios y darlos a conocer fuera del pais.

El documento, elaborado por un equipo liderado por el profesor Óscar Fuertes, hace una radiografía de la demografía litoral de Galicia y de su cadena mar-industria destacando los alrededor de 40.000 empleos directos que dependen de ella, así como los múltiples oficios, tanto en el pasado como actuales, vinculados con el mar. A los marineros, mariscadores, percebeiros, acuicultores o bateeiros se añaden los operarios de la conserva, afumadores, balleneros, salgadores, muiñeiros, carpinteros de ribera, torneiros, redeiras, fareros o barqueros, entre otros muchos.

El Plan da Cultura Marítima de Galicia también hace un repaso por la variedad de bienes inmuebles, bienes muebles y patrimonio inmaterial con los que cuenta la comunidad. Entre las construcciones citan astilleros y carpinterías de ribera, fábricas de conserva y salazón, estands de pescadores y lavaderos de redes, viviendas marineras, muelles, embarcaderos, faros, lonjas, cementerios, ermitas o santuarios y restos arqueológicos, entre otros muchos.

De las artes de pesca a la tradición oral

Ya entre los bienes muebles, constan las artes de pesca, herramientas empleadas por los distintos profesionales del mar, útiles de cestería, atuendo y calzado, partes de barcos hundidos y embarcaciones tradicionales. Y en el patrimonio inmaterial se incluyen cuestiones como las fiestas (populares, gastronómicas y religiosas), la tradición oral y el folclore a través de adivinanzas, canciones, cuentos, leyendas, refranes o léxico marítimo, la cocina marinera, muestras de arte, la iconografía marinera, museos o los propios oficios del mar.

El documento encargado por la Xunta también hace un análisis de las fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas para el patrimonio marítimo de Galicia, y destaca, entre otras, cuestiones positivas como la existencia de abundante patrimonio sumergido, de artes de pesca tradicionales sostenibles, de un gran número de museos del mar y de muchos oficios tradicionales que aún persisten. Estos aspectos, añade, pueden suponer grandes oportunidades siempre que se logre ahondar y culminar la apuesta por ellos.

Una vez analizados todos estos factores, el plan establece cuatro grandes objetivos estratégicos con 100 proyectos o acciones para llevar a cabo hasta 2030 con los que preservar y activar la cultura marítima gallega. El primero de ellos se centra en blindarla y promoverla en diversos ámbitos y como eje de cohesiones social, apostando por 39 medidas como un estudio de las rías, ríos y paisajes marítimas, la elaboración de un atlas virtual del patrimonio marítimo gallego o de un diccionario de la cultura marítima. La segundameta busca la convergencia de las instituciones, recursos y agentes a través de 25 acciones como la creación de un observatorio de la cultura marítima, la digitalización de documentación histórica de las cofradías o la organización de una gran muestra de la cultura marítima.

La tercera aspira a potenciar el sector productivo de las empresas tradicionales del mar con 23 proyectos como un sello de la cultura marítima, formación profesional en este ámbito y la creaciones de programas laborales. Y la cuarta busca extender el conocimiento de la cultura marítima en todo el orbe mediante 13 iniciativas, como la creación de grupos de investigación, un programa de promoción exterior y liderazgo de una Red Europea de Entidades de Patrimonio Marítimo.

El presidente de los 14 astilleros artesanales ligados a estas zonas aboga por crear una FP

Ramón Collazo, presidente de la Asociación Galega de Carpintería de Ribeira y titular de Astilleros Catoira, está a la espera de conocer el contenido del plan autonómico, pero tiene claras las prioridades de su gremio: “Reivindicamos o relevo xeneracional e a implantación de formación reglada” para que no desaparezca una actividad que hoy asumen en Galicia catorce empresas “dende Cervo ata Vigo”.

Destaca, además, que su sector “entra de cheo nos requerimentos da economía circular, porque usamos madeira, material benévolo e eecolóxico que vai da man da silvicultura tradicional”. Su lógica es, además, innegable, porque se pregunta que en caso de perderse su ioficio “quen vai manter as 1.500 embarcacións profesionais de madeira que aín quedan?”.

Así, su profesión -muy ligada a algunas de las áreas nai citadas- se asienta en dos pilares: “Está o cultural e artesanal, xa recoñecido porque somos Ben de Interes Cultura, BIC; e, por outro lado, temos claro que non se vai recuperar se non volvemos a construír embarcacións cos materiais tradicionais, polo que pedimos unha regulación para sentar as bases de futuro e formación reglada”.

Además, opina que si se implanta la FP en carpintería de ribera “debería incluír técnicas tradicionais pero tamén as novas e os soportes dixitais” que permitirán su continuidad en el siglo XXI. Acaba anticipando que las próximas jornadas de su asociación serán en otubre “no asteleiro San Ciprián de Cervo, que ardiu en parte”.