Obradoiro

La segunda unidad, prioridad del Obradoiro para comenzar a ver la luz tras la mala racha

Con la derrota ante el Tenerife el equipo ha empatado con el Breogán, que marca el descenso, y el Granada

Los cinco jugadores con más minutos en cada choque anotan 56,5 de los puntos por partido para los de Sar

Rubén Guerrero tuvo una excelente actuación ante el Tenerife con 10 puntos sin errores y 5 rebotes

Rubén Guerrero tuvo una excelente actuación ante el Tenerife con 10 puntos sin errores y 5 rebotes / Jesús Prieto

El Monbus Obradoiro sigue buscando la forma de salir de la mala racha de resultados en la que encadena cuatro derrotas consecutivas y que en 19 partidos solo les ha permitido llevarse el triunfo en seis ocasiones. El equipo precisa que algunos de sus jugadores respondan y empiecen a subir sus prestaciones y, como bien dice Moncho Fernández, técnico de los compostelanos, que recuperen los porcentajes que se les presupone.

En lo que va de campeonato, los cinco jugadores con más minutos en cada choque han promediado 56,5 puntos de los 81,2 de media que tiene el equipo. Esto supone que la aportación del resto de jugadores sea de 24,7 en cada encuentro. A nivel porcentual se traduce en que el 69,6 por ciento de los puntos que suben al marcador del Obradoiro lo aportan los cinco jugadores que suman más minutos en cada choque por separado.

Una cifra baja que deja la dependencia de la carga ofensiva a esos jugadores que están más tiempo en pista y que necesitan del respaldo de sus compañeros del banquillo para tener la seguridad de que el equipo va a seguir sumando. La versatilidad de opciones que podría dar una mayor prestación de la segunda unidad serviría para que Moncho presentase más variantes en el campo. Pero ahora mismo es difícil visualizar cambios significativos si algunos jugadores no dan ese paso adelante.

La realidad es que de las seis victorias obtenidas por el Obradoiro, en cinco de ellas la segunda unidad estuvo en 30 puntos o más, mientras que en las trece derrotas tan solo lograron estar en esos guarismos en tres ocasiones (Andorra, Granada en casa y el último choque ante el Tenerife en Sar).

En los partidos que los compostelanos han ganado, el promedio de puntos que ha aportado la segunda unidad ha sido de 30,5 (34 % de los puntos del equipo). Cabe decir que la subida de los cinco jugadores con más minutos en esos triunfos también asciende hasta los 59,3 puntos, pero el aumento de los jugadores con menos tiempo en pista es muy superior, ya que supone un 23,5 por ciento más de los puntos que aportan de promedio en la media total, traducida en 5,8 puntos más.

Viejos conocidos

A la hora de observar a los jugadores que ya estaban en la disciplina compostelana la pasada campaña, ha habido un descenso de prestaciones en general en el aspecto anotador. De la pasada temporada en el Obradoiro siguen esta campaña Thomas Scrubb, Fernando Zurbriggen, Marek Blazevic, Álvaro Muñoz, Rubén Guerrero y Álex Suárez. En la pasada campaña lanzaban 30,7 tiros y esta lo han reducido a 25,6, donde si se restan las canastas de Scrubb han tirado 16,9 (19,5 en la 22-23), reduciendo su acierto hasta el 44,4 % (45,1 % en la 22-23).

El alero canadiense, titular indiscutible, registra números mejores a la pasada campaña al mejorar en anotación con 12,6 por los 11,6 puntos del curso anterior. Lo hace con mejor porcentaje de tres (39,3 % por el 38 % de la 22-23) y de dos (59,5 % por el 54,9 % de la 22-23), pero sobre todo sorprende porque ha reducido sus tiros intentados esta temporada de los 11,2 a los 8,7.

Zurbriggen a aumentado sus puntos, dado el aumento de minutos (de 11:04 a 20:58), pero se ha plasmado en unos peores porcentajes de tiro que si mejorase, especialmente el paupérrimo 23,6 % en tiros de tres, se traduciría en una aportación clave para el equipo. Blazevic sí ha mejorado en porcentaje de acierto, pero tiene mayor competencia este curso y mantiene sus problemas en el tiro libre. El lituano es uno de los jugadores llamados a dar un paso adelante dado a su gran capacidad ofensiva.

Mientras, en el trío de españoles, Álvaro Muñoz ha demostrado una mejor versión que la campaña pasada, sobre todo al inicio. En los últimos choques no ha podido sumar como en su buen arranque, pero de vez en cuando demuestra que es un jugador más que apto en esa segunda unidad, sobre todo en defensa. Guerrero registra cifras inferiores al año pasado, lógico al tener más competencia. Aún así, como demostró ante el Tenerife, es un jugador que puede cumplir y sumar mucho en ambos lados de la pista y debe asumir ese papel de jugador que cumple y escapar de los errores que tuvo en este curso. Su mejor versión da mucho. Mientras, Súarez ha mejorado sus porcentajes de tiro, pero lanza un tiro menos por partido con tan solo dos minutos menos jugados, debe asumir los tiros liberados y seguir sumando para el equipo.

En relación a los nuevos jugadores, sin duda del que más se espera ahora mismo es de Rigoberto Mendoza que, salvo el espejismo de Lugo, parece que aún no ha recuperado las sensaciones tras la lesión. Sin duda, si regresa al nivel que tenía antes de golpearse en Turquía, el equipo tendrá un activo que supondrá victorias.