Concentración en Santiago contra la terapia de electroshocks aplicada al joven de Arzua

La Asociación de Pacientes y Usuarios del Complejo Hospitalario de Santiago denuncia que este caso “lamentablemente, no es el único”

Firmas en la mesa de Conxo contra la terapia TEC de Iván

Firmas en la mesa de Conxo contra la terapia TEC de Iván / Jesús Prieto

Redacción

La Asociación de Pacientes y Usuarios del Complejo Hospitalario de Santiago (CHUS) ha hecho un llamamiento este lunes a participar en la concentración convocada por una familia de Arzúa contra la aplicación de una terapia electroconvulsiva (TEC) para tratar a un joven de 30 años. La concentración tendrá lugar mañana, martes 11 de marzo, a las 19:30 horas en la plaza del Toural. Esta terapia, pese a la negativa de la familia, ha sido autorizada por el magistrado del Juzgado de Primera Instancia número 6 de Santiago en base a las conclusiones de un reconocimiento judicial y forense realizado al paciente, así como en el informe complementario emitido por una psiquiatra. Sin embargo, la familia se opone y ha organizado un puesto de recogida de firmas a la salida del centro sanitario.

Asimismo, la Asociación de Pacientes y Usuarios del CHUS respalda a la familia y considera que este tipo de terapia “no cuenta con soporte científico”. Señalan, además, que “puede producir daños en la memoria y lesiones cerebrales”. Desde la plataforma, rechazan que “la psiquiatra, ante la negativa legítima del paciente a recibir el tratamiento, decidiese acudir a la vía judicial para aplicar una terapia invasiva, ignorando los antecedentes vitales y de salud de Iván y descartando otras alternativas de conciliación, diálogo y atención”.

En relación a la resolución judicial, la asociación de pacientes considera que no ampara “el derecho del paciente al consentimiento informado y lo priva de la tutela judicial, al no considerar válida su negativa al tratamiento e indagar sobre otras posibles alternativas de atención que concilien el derecho a la salud y la autodeterminación persona”. Por último, denuncian que este caso “lamentablemente, no es el único” y son “muchos” los pacientes que “en silencio soportaron y soportan el tratamiento TEC en la unidad psiquiátrica del hospital de Conxo”.

Ingreso judicial por el "elevadísimo riesgo" de suicidio

Iván permanece ingresado desde principios del mes de febrero en la planta de Psiquiatría del Hospital de Conxo tras ser atendido por un cuadro psicótico, el primero que sufría según su padre. Dada su situación, evaluada por los psiquiatras en el hospital, y ante el "altísimo riesgo para su vida" que supone la "grave patología" que padece, recoge un auto emitido por el juzgado número 6, se determinó su ingreso judicial en el Hospital de Conxo, así como que se le aplique un tratamiento de electroshocks.

En el auto, el juez llama la atención sobre que el joven padece una "patología grave" que supone un peligro para su propia vida, dado que persiste en la actualidad "sintomatología psicótica activa", y que, a mayores, no es "consciente de su trastorno mental y de la necesidad del tratamiento pautado", por lo que se encuentra "imposibilitado" para "decidir en el momento actual".

El juez, que se basa en los informes de psiquiatría del hospital, así como en una evaluación forense por parte del Imelga y en un reconocimiento judicial del joven, establece que existe "un riesgo grave e inminente para la integridad física del paciente de ser autorizada su alta hospitalaria y su traslado al centro propuesto por el progenitor", que es "manifiestamente inadecuado de manera objetiva para el tratamiento que precisa".

Sobre el tratamiento propuesto por su psiquiatra, el auto recoge que, desde el ingreso, se han intentado, sin éxito, "cinco tratamientos orales alternativos" y que los especialistas consideran que la terapia de electroshock está "absolutamente justificada". El joven arzuano ya ha recibido seis de las sesiones programadas.