Arranca la obra para peatonalizar el Campus Sur: 4 meses de plazo y 40 estacionamientos menos

La actuación mejorará la accesibilidad en el entorno de las residencias universitarias y aumentará las zonas de ocio

Se pondrá en valor el conjunto arquitectónico y su conexión con la Alameda

Costará 335.000 euros

Operarios y maquinaria de construcción trabajando ayer en la avenida de Antonio Raimundo Ibáñez, en el Campus Vida

Operarios y maquinaria de construcción trabajando ayer en la avenida de Antonio Raimundo Ibáñez, en el Campus Vida / Jesús prieto

El Campus Vida estará en obras los próximos cuatro meses. Tal y como confirmó el Concello de Santiago, este lunes comenzaron los trabajos para semipeatonalizar el entorno de las residencias universitarias, un proyecto que tiene un plazo de ejecución de 120 días y con el que se perderán un total de cuarenta estacionamientos de la zona azul.

La maquinaria empezó a trabajar este lunes en la avenida de Antonio Raimundo Ibáñez e irá avanzando hacia la plaza de Rodríguez Cardarso, el eje principal sobre el que se actuará. Las obras no afectarán por el momento a la circulación rodada en el recinto universitario.

La reurbanización supondrá, como adelantó EL CORREO, que el Campus Vida pierda en torno a 40 plazas de aparcamiento de la zona azul. Concretamente, la actuación contempla la eliminación de las 36 plazas existentes en los dos tramos (18 en cada uno) de la avenida del profesor Legaz Lacambra, que tras la intervención pasarán a estar reservadas para uso exclusivo de la USC.

En la calle, que está cortada en medio por la amplia avenida de Antonio Raimundo Ibáñez, se habilitará una zona delimitada de estacionamiento que sustituirá las plazas que tiene actualmente reservadas la USC en la plaza de Rodríguez Cadarso, que se suprimirán. De hecho, la idea es eliminar completamente el tráfico de esta plaza para que tome un uso exclusivamente peatonal.

A mayores, la actuación también contempla la eliminación de algunas plazas (al menos cuatro) en las inmediaciones de la rotonda que comunica la avenida de Antonio Raimundo Ibáñez con la avenida da Coruña y la escalinata que comunica con el parque de la Alameda. En todo caso, la humanización del Campus Vida no supondrá alteraciones en el tráfico de las avenidas da Coruña, das Ciencias y das Burgas (las que rodean el espacio central donde se actuará) ni tampoco se eliminarán plazas de estacionamiento en estas calles, con zona azul, señalan desde el Concello.

Raxoi peatonalizará la zona central del Campus Sur poniendo en valor el patrimonio histórico y acometiendo una reurbanización completa. También se reordenarán los jardines y las zonas verdes, en una actuación que pretende impulsar este espacio para el ocio de los universitarios y de los vecinos. Todo esto adaptando también el espacio público para lograr las mejores condiciones de accesibilidad posibles compatibles con la protección patrimonial.

Los trabajos cuentan con un presupuesto de 334.935,65 euros, con IVA, y han sido adjudicados a la empresa Eulogio Viñal Obras y Construcciones SA. El concejal de Obras, Xesús Domínguez, destaca que la intervención permitirá “mellorar a mobilidade e a accesibilidade da zona, aumentar os espazos peonís e reorganizar o acceso de vehículos”.

El edil detalla que la intervención se centrará en la “peonalización da zona central da Residencia cunha plataforma compartida e única, a reordenación de usos con preferencia para percorridos peonís e a xeración de espazo de calidade tanto para os peóns como para os elementos construído”. El proyecto tiene como objetivo conseguir “as mellores condicións de accesibilidade posibles compatibles coa protección patrimonial a través da reurbanización con novos materiais e seguindo criterios de sustentabilidade que tamén incluirá a renovación de xardíns e especies vexetais”.

Con esta actuación, la avenida da Coruña pasará a formar parte de una plataforma compartida, para propiciar la continuidad entre la Alameda y la Residencia de Estudiantes. El pavimento de hormigón en el primer tramo entre la Alameda y el estanque dejará paso la una superficie vegetal. En el caso de las aceras de baldosa, se mantendrán con reposiciones puntuales de elementos rotos; y en el caso del hormigón de la calzada, se utilizará como base de nuevos pavimentos de hormigón lavado y de las zonas vegetales, con perforaciones puntuales para permitir el drenaje. Además se realizará una renovación completa de las instalaciones subterráneas de alumbrado en las zonas en las que se renuevan los pavimentos.