Sanidad califica como excelentes las aguas de las playas fluviales del Deza y el Liñares

Un grupo de bañistas, en el río Deza a su paso por A Carixa

Un grupo de bañistas, en el río Deza a su paso por A Carixa / Bernabé

Salomé Soutelo

Desde hace 37 años, el Ministerio de Sanidad elabora un informe sobre la calidad del agua en zonas  de baño tanto marítimas como continentales. Con esta documentación puede comprobar el nivel de contaminación y tomar medidas para frenarla.

El Informe Nacional de Calidad de Aguas de Baño realizó analíticas en 2.268 puntos de muestreo, de los que 1.987 son marítimos y 281, continentales. En las aguas continentales, la temporada de baño abarca desde junio a septiembre, mientras que en las marítimas se extiende desde principios de mayo a finales de septiembre salvo en Canarias, donde solo hay un breve paréntesis invernal.

El informe requiere al menos 8 muestras del agua por temporada, y una previa, hasta 14 días antes de que comience ésta. Ya dentro de la temporada, entre muestra y muestra pueden pasar, como tope, 30 días.

En las comarcas, se han tomado muestras en ocho zonas de baño: en el río Deza en Lalín; en este mismo cauce pero en Cruces; en el Liñares a su paso por A Estrada y, ya en Cotobade, en tres puntos distintos del río Almofrei, en el río de Calvelo y en el Cabanelas. Seis de estos ocho tramos han obtenido una calificación de excelente durante el año pasado. Es la evaluación más alta. Por su parte, el río Liñares en A Estrada y el Deza en Cruces se quedan con una calificación de buena. Sobra recordar que el Deza padece los vertidos que llegan a uno de sus afluentes, el Asneiro.

Las muestras de agua que se toman cada temporada permiten medir la contaminación tanto de origen fecal (los sumideros de asentamientos humanos) como de la actividad agroganadera, midiendo la presencia de enterococo intestinal y de la bacteria Eschericia coli. Además, también se realizaron inspecciones visuales para analizar la transparencia del agua o la presencia de residuos tan diversos como cristal, plástico o caucho. 

Aunque el año pasado la sequía tiñó de verde el pantano de Portodemouros debido a la presencia de cianobacterias, este no está dentro de los puntos de muestreo de dicho informe, ya que no es una zona de baño. Pero en la misma circunstancia se hallaron aguas continentales que sí se usan como áreas recreativas: son los tres pantanos ourensanos de Bande, Muiños y A Veiga.

En las comarcas no hubo ninguna zona fluvial que estuviese cerrada al baño durante la temporada pasada, ni se dio ninguna de baja. Sí ocurrió a nivel gallego, donde no se pudo emplear la Playa Sacido, en Viveiro, ni la de San Bartolos, en Barreiros, al haber riesgo de desprendimientos. Además, se dio de baja en los puntos de muestreo la playa continental de O Cargadeiro, en Ribadeo, al pasar a forma parte de un punto de muestreo cercano.

Decíamos que el Deza padece, con cierta frecuencia , los vertidos del Asneiro. El Deza desemboca en el Ulla, que ejerce de frontera natural entre las provincias de A Coruña y de Pontevedra. A lo largo de su recorrido, el agua que le aportan sus afluentes merma su calidad, y eso se nota cuando ya está en Catoira, cerca de su desembocadura.Las muestras que se tomaron del agua en esta zona le han dado una nota de insuficiente en su calidad del agua.