Santiago espera ahorrar 250.000 euros anuales con la gestión directa del cobro de las multas

El contrato con la empresa caduca el 31 de diciembre y la intención es no renovarlo // La sociedad municipal de transportes, Tussa, se hará cargo si sale adelante la medida

El radar de Conxo, uno de los que más multa en Santiago

El radar de Conxo, uno de los que más multa en Santiago / Jesús Prieto

Santiago quiere asumir la gestión directa del cobro de las multas de tráfico para ahorrarse 250.000 euros anuales. El concelleiro de Mobilidade, Xan Duro, anunció esta mañana en rueda de prensa que el Ejecutivo local no va a licitar un nuevo contrato para que el servicio continúe externalizado. Será la empresa municipal de transportes Tussa la que se encargue a partir de ahora. El primer paso, explicó Duro, será la ampliación del objeto social de la sociedad municipal a través de la modificación de sus estatutos. "Confiamos presentarlos cuanto antes en el Consejo de Administración de Tussa", indicó.

Duro aseveró que no es la primera vez que se habla de la gestión pública de las multas en el Pazo de Raxoi, pero ante el fin del contrato el 31 de diciembre el Concello decidió que era el momento oportuno de municipalizar el servicio. La Xunta de Goberno local adjudicó la gestión de las multas en noviembre de 2018, por un plazo de tres años más dos años de prórroga.

Actualmente, explicó, la empresa que se encarga del cobro de multas percibe casi un 27 % de los ingresos recaudados en vía voluntaria. En 2022, de los algo más de dos millones de euros que el Concello ingresó por multas de todo tipo, la concesionaria se llevó unos 555.000 euros. “Una vez descontados los distintos gastos de la empresa Tussa estimamos que el ahorro de la medida rondará los 250.000 euros anuales”, explicó el concejal. “Ya de por sí es motivo suficiente para recuperar este servicio”, añadió. Entre las ventajas de la gestión pública, el concejal de Compostela Aberta citó también que de este modo se usará el mismo programa informático, que ya se emplea en el Concello para la tramitación de las multas, con lo que se incrementará la eficiencia del sistema. 

Trabajadores

La previsión es que la medida entre en vigor el 1 de enero. Pero en caso de que no diese tiempo, algo que Duro consideró improbable, siempre se podría prorrogar el contrato que actualmente recae en la empresa SCI (Servicios de Colaboración Integral), una firma con sede en Bilbao. Para el servicio de gestión de las multas Tussa tendrá que sumar entre cinco y seis personas, previsiblemente serán los mismos que trabajan ya para la compañía privada.

El concejal de Mobilidade se mostró convencido de que la propuesta municipal saldrá adelante sin problema por parte del resto de grupos municipales. “Incluso el PP fue muy insistente y llevó a pleno una propuesta en este sentido”, recalcó. Los populares rechazaron valorar la propuesta de Raxoi, a la espera de disponer de más información. La modificación de los estatutos de Tussa tendrá que ser evaluada en el consejo de administración de la entidad y posteriormente sometida a su junta general, en la que están representados todos los concejales del Ayuntamiento. Por este motivo, el bipartito necesitará de apoyos para sacar adelante la remunicipalización. El portavoz del PSOE, Gonzalo Muíños, explicó que esperarán a tener un estudio detallado para decidir si apoyan la gestión directa. “Si hay argumentos de peso lo haremos, nosotros no somos fanáticos ni de uno, ni de otro modelo como son en este caso el BNG y Compostela Aberta”, recalcó. Muíños les reprochó la actitud manifestada en el pasado mandato cuando “bloquearon el contrato del agua”, pese a que los informes “decían claramente que el modelo concesional era el que mejor se adaptaba a las necesidades de Santiago”.